Una joven gaditana de 32 años padece cáncer tras un implante de pechos al que fue sometida hace cuatro años. Cristina Boy empezó a desarrollar una inflamación severa, aunque el cirujano que la trataba no le dio importancia, siendo diagnosticada poco después con un linfoma asociado a la prótesis mamaria.

Aunque se trata de un cáncer asociado al implante de pechos no es mamario. La enfermedad se debe al desarrollo de un tejido rugoso que rodea al implante. El cirujano que la trataba le recomendó estos implantes por tener un mayor agarre a los tejidos cuando hiciera deporte, la fricción continua durante años realizando esta actividad es la que le habría provocado el cáncer.

Pérdida de pelo y fiebres altas

“Estaba inflamadísimo, como una pelota y amoratado”, explica Cristina a El Español. De hecho, la hinchazón iba acompañada de “pérdida de cabello y fiebres altas casi cada noche”, asegura la joven de 32 años. Tras estos síntomas y ser diagnosticada con cáncer, la chica gaditana está recibiendo un tratamiento de radioterapia, tiene dos ganglios inflamados y los médicos estudian la posibilidad de que tenga metástasis.

Los implantes de la marca Allergan, los que Cristina se inoculó, fueron retirados del mercado en 2019 en Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea. Por ello, la gaditana ha decidido demandar a la compañía Allergan, por la que pide una indemnización de 124.000 euros. La empresa le ha ofrecido 6.000 euros por los problemas causados.