Como es habitual y después del acto oficial con motivo de la Pascua Militar, sus majestades Felipe y Letizia disfrutaron del Día de Reyes en compañía de sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, quienes abrieron los regalos de un día mágico en casa de su abuelo materno, Jesús Ortiz. Una cita que ya se ha convertido en una auténtica tradición de Reyes.
A medía tarde y conduciendo el rey Felipe su propio coche, la familia real hizo su entrada en la urbanización madrileña donde vive el padre de Letizia. Intentando no ser captados en el ámbito de su vida privada, entraron rápidos y sin detenerse ante la prensa que llevaba esperándoles desde primera hora de la tarde.
Después de disfrutar de una tarde en familia y comer el típico roscón, los monarcas abandonaron la vivienda al rededor de las 21:30 de la noche y aunque la noche ya estaba bastante entrada se puede comprobar como tanto Letizia como sus hijas salen de lo más alegres y contentas, con una sonrisa de oreja a oreja que demuestra lo bien que se lo han pasado con la familia Ortiz.
Un día de lo más intenso para el Rey Felipe y la Reina Letizia, que durante la mañana del 6 de enero presidieron la tradicional Pascua Militar, el que se ha convertido en el primer acto oficial del año.