El equipo del presidente electo, Donald Trump, lo está pasando mal para encontrar a artistas que quieran actuar en la toma de posesión del magnate el 20 de enero. En cambio, Obama se rodea de las caras más conocidas de la música en su fiesta de despedida de este viernes.
Bruce Springstee, Stevie Wonder, Beyoncé y Paul McCartney son solo algunos de los nombre que suenan para la velada en la Casa Blanca. Pero no solo músicos. Los rumores también hablan de la presencia de estrellas de Hollywood, como Bradley Cooper, Samuel L. Jackson, George Lucas y el director J.J. Abrams. Oprah es otra de las esperadas.
Las dificultades de Trump
De momento, Trump ha conseguido que el Coro del Tabernáculo Mormón acepte su invitación a la toma de posesión, no sin polémica. Y es que una de las integrantes del coro ha decidido abandonarlo por no tener que cantar en la investidura del nuevo presidente de EEUU. Ésta y la de una de las finalistas del concurso de talento American Idol, Jackie Evancho, son, de momento, las únicas confirmaciones.