El consejero delegado de Tesla y SpaceX, Elon Musk, ha anunciado a los inversores de Twitter que planea recortar casi el 75% del personal de la red social si finalmente toma el control de la misma.
Según ha informado The Washington Post, el magnate pretende echar a unos 5.500 empleados, dejando una plantilla de poco más de 2.000 trabajadores. Twitter ya esperaba despedir a parte de su equipo debido a factores económicos, si bien en ningún momento había planteado reducir el personal en tres cuartas partes.
Afectación tecnológica
Con todo, los recortes no solo afectarían a los trabajadores, sino también a la infraestructura de la compañía y a los centros de datos que permiten el funcionamiento de la plataforma.
La decisión afectaría así a millones de usuarios de la red social, ya que podrían incrementarse los hackeos y quedar más expuestos a material ofensivo, según han detallado expertos consultados por la agencia Bloomberg.
Una compra tortuosa
Musk tiene de fecha hasta el próximo 28 de octubre para cerrar la adquisición de Twitter si quiere evitar ir a juicio. Sin embargo, las autoridades federales han abierto una investigación contra el empresario a raíz de la procelosa compra de la plataforma.
Pese a que la operación ha dado muchas vueltas, el multimillonario se ratificó hace semanas en su propuesta inicial de compra por 54,20 dólares por cada acción de Twitter, lo que implicaría un total de 44.000 millones de dólares (44.880 millones de euros).