La Universitat Oberta de Catalunya (UOC) ha desarrollado un sistema de inteligencia artificial que detecta estudiantes en riesgo de suspender una asignatura. La herramienta está aún en fase de ensayo y ya ha superado tres pruebas piloto.
El sistema ha demostrado un alto nivel de precisión: a medio semestre, es capaz de predecir con una exactitud de casi el 90% si un alumno será capaz de aprobar. Pero es que, al empezar el semestre, ya lo predice con una seguridad del 60%.
3.000 alumnos
El equipo de la universidad encargado del proyecto analiza grandes conjuntos de datos y aplica algoritmos con modelos predictivos del progreso académico. De momento, las tres pruebas piloto ya han contado con tres millares de estudiantes.
Hace cinco años que la UOC trabaja con este gran volumen de datos de los perfiles de los estudiantes, que se han agrupado de manera anónima. Los perfiles incluyen información de la actividad en el campus y del rendimiento académico, datos en los que se pueden buscar patrones de conducta.
Verde, ámbar, rojo
Una vez recibe la información, el modelo hace sus cálculos y asigna a cada estudiante un semáforo verde, rojo o naranja según las probabilidades de éxito. Aquí entra en juego el profesor de la asignatura, que puede enviar un mensaje personalizado al alumno informándole de su nivel de riesgo y proponiendo posibles vías para mejorar sus posibilidades.
El centro de innovación educativa eLearn Center, impulsor de la iniciativa, tiene previsto aumentar el número de pruebas piloto para hacerlas llegar a muchas más asignaturas de los estudios que ofrece la universidad. El objetivo es que en 2022 el modelo de predicción sea tan preciso que pueda funcionar en tiempo real para asistir al alumnado en su día a día.