El coronavirus ha digitalizado España a marchas forzadas. Desde el teletrabajo, hasta la telemedicina, muchos sectores se han tenido que adaptar a la pandemia para reaccionar rápido y de la mejor manera posible. Así, en los centros de atención primaria de Cataluña se han multiplicado por cinco las visitas telemáticas durante la crisis sanitaria. Y en España, más del 85% de las consultas externas hospitalarias realizadas en abril fueron por teléfono y sin necesidad de hacerlas de manera presencial como hasta ahora.
Según un informe impulsado por Barcelona Health Hub y liderado por Esade Creapolis y el Institute for Healthcare Management de Esade, aunque todavía es temprano para poder medir el impacto real de la telemedicina con el Covid-19, todos los datos disponibles muestran un crecimiento muy acelerado de esta actividad en España.
Mejoras necesarias
Sin embargo, los expertos coinciden en que, a pesar de la agilidad en la adecuación de la telemedicina, se han experimentado diversas carencias durante esta crisis sanitaria. “Tanto los hospitales públicos, como la atención primaria, no estaban bien preparados, hecho que explica que la atención se haya hecho principalmente por teléfono y no con un sistema digital más sofisticado”, subraya Manel Peiró, director del Institute for Healthcare Management de Esade.
A todo ello, Oriol Alcoba, de Esade Creapolis, añade también la necesidad de “desplegar un buen marco regulatorio para consolidar los avances experimentados”. Pero si algo ha quedado bien demostrado durante esta crisis es que las tecnologías digitales son útiles en múltiples situaciones del ámbito sanitario, como el screening de casos sospechosos, el seguimiento de pacientes con el virus; el control de personas con tratamientos de larga duración, así como en la consulta de pacientes sin Covid-19, pero con casos de urgencias o visitas programadas.
Un complemento a las consultas presenciales
Es verdad, por otro lado, que el principio de la pandemia la ausencia de una plataforma tecnológica --a excepción del sector asegurador-- y la falta de recursos colapsaron las urgencias telefónicas. "Pero es sorprendente la velocidad con la que lo subsanó el sistema, ya que, en los primeros días desde el inicio de la pandemia, la mayoría de los proveedores sanitarios ya se habían adaptado para proveer dicha atención”, subraya Peiró.
Además, los pacientes parecen aplaudir estos sistemas. De hecho, según una encuesta de DKV sobre la consulta médica virtual, el 89% de los pacientes asegura que volvería a utilizar este método de consulta y lo recomendaría, mientras que el 84% afirma que obtuvo una respuesta rápida por parte del médico a su consulta. Por ello, los expertos abogan por combinar la telemedicina con las consultas presenciales, para evitar colapsos y otros problemas en caso de rebrote. “Es el momento de consolidar este modelo de atención, complementario a la atención presencial, y no dar un paso atrás en el escenario posterior a la pandemia”, matiza Luis Badrinas, CEO de Barcelona Health Hub y Community of Insurance.