Google es una de las compañías que más frentes tiene abiertos. Hay pocos sectores que tengan que ver con el negocio digital o de internet que no hayan tocado y la música no es uno de ellos. En este sentido, la empresa con sede en Mountain View tiene ya en marcha lo que podría resultar una de las mejores noticias para músicos profesionales y aficionados de todo el mundo.
Se trata de un sintetizador regido por inteligencia artificial. Para los que no lo conozcan, el sintetizador es uno de los instrumentos más utilizados por su versatilidad, ya que es capaz de producir una o varias ondas de sonido y modificarlas a través de parámetros para lograr cualquier tipo de sonido que se pueda imaginar. En este sentido, la inclusión de un algoritmo capaz de alterar el sonido con inteligencia artificial es muy interesante, ya que abre una nueva puerta a la composición. Pero, ¿cómo lo hace?
Inteligencia artificial
Dos de los términos más de moda en la computación hoy en día: la inteligencia artificial y el aprendizaje automático (machine learning). El primero tiene que ver con cómo las máquinas son capaces de ‘entender’ de manera compleja las órdenes que se le dan e incluso de tomar decisiones 'propias’. El segundo, se refiere a cómo los programas informáticos recopilan información de los hábitos de uso de un determinado usuario para ofrecer mejores respuestas ante una determinada situación.
¿Y qué tiene que ver todo esto con la música y los sintetizadores? La respuesta es que, si hasta ahora había que conocer el funcionamiento del sintetizador (y conceptos de síntesis sustractiva o aditiva) para lograr nuevos sonidos, ahora será el propio NSynth de Google (así se llama el dispositivo) el que creará nuevos sonidos a partir de los hábitos musicales del intérprete.
Fuera de venta
Aunque un instrumento así tendría bastante demanda, el caso es que no ha decidido comercializarlo, y no se sabe aún si lo hará algún día. La razón es que no es la principal vía de negocio de la compañía y, por lo tanto, de momento sólo está disponible como un proyecto de autoconstrucción para que cualquier usuario con conocimientos de electrónica pueda montarlo en su propia casa, algo así como lo que ocurre con el Google Cardboard.