La movilidad eléctrica se ha convertido en una variable fundamental en las ecuaciones de futuro de los grandes fabricantes y distribuidores de la industria automovilística. Da igual que se trate de vehículos de transporte de personas o de mercancías, de coches familiares o de motocicletas, a día de hoy la incógnita a despejar sigue siendo la misma: la autonomía limitada de todos ellos y el reducido número de puestos disponibles para la recarga eléctrica. Es en este punto del problema donde la compañía especializada en motocicletas eléctricas Kymco Mobility ha hecho su apuesta presentando Kymco Iones, un sistema de baterías extraíbles disponibles en una red automática de suministro.
El proyecto es ambicioso, pero sin ambición no hay futuro. Pensando en ese tiempo verbal y en lo que está por llegar, con el sistema Kymco Iones la marca taiwanesa de motocicletas eléctricas pondrá a disposición de sus clientes la red de recarga más amplia del mercado: un total de veinte países contarán con puntos de suministro Iones. De Taiwán al mundo, porque en este país asiático el sistema Kymco Iones ya está implantado.
Distinto diseño, tamaño y potencia
¿Y cómo funciona? Las pequeñas baterías se almacenan en una especie de máquina expendedora. Con un código personificado para cada cliente, éste podrá obtener la batería (o baterías) que necesite para emprender viaje. La compañía ha previsto que estos puestos de servicio automático de baterías cargadas serán de distinto diseño, potencia y tamaño en función de si están situados en empresas, en zonas comunitarias o en la vía pública.
Tienda de Kymco Mobility, empresa del sistema Kymco Ione / KYMCO MOBILITY
Tienda de Kymco Mobility, empresa responsable del sistema Kymco Iones / KYMCO MOBILITY
Si Kymco Mobility planea poner en marcha una red tan extensa de baterías es porque en sus previsiones empresariales entra el cálculo de vender en torno a 500.000 motos eléctricas en los próximos tres años. Cuenta con diez modelos de escúteres, su apuesta estrella, que disponen de una batería integrada de cincuenta kilómetros de autonomía. A ella se le suman otras dos extraíbles, de treinta y cinco kilómetros de autonomía cada una. Estas últimas son las que se pueden encontrar y recargar en los puestos Iones. Y, como comodín, bajo el asiento de la escúter se pueden guardar otras tres baterías más. Un total de doscientos kilómetros de autonomía en una moto eléctrica gracias a este sistema.