El dramaturgo Josep Maria Benet i Jornet ha fallecido este lunes a los 79 años víctima del coronavirus SARS-CoV-2. La hija del dramaturgo Carla Benet ha confirmado que el escritor, diagnósticado de alzheimer en 2015, ha sido víctima del Covid-19 en la residencia donde se encontraba en Lleida. 

El autor de La nau será incinerado el miércoles sin asistentes, tal y como está obligado durante el estado de alarma. Aun así, su hija ha anunciado que tras el confinamiento se le hará una "fiesta" en Barcelona. La voluntad de la también escritora es que cuando se puedan celebrar grandes reuniones, "hacer una fiesta para celebrar su vida, no un funeral. No es lo que mi padre querría".

Carrera

El escritor, a quien sus amigos llamaba Papitu, se hizo muy popular como creador de telenovelas de TV3 como Nissaga de Poder, Poblenou o Laberint d'ombres. Multipremiado en el país, recibió entre otros la Cruz de Sant Jordi en 1997, en 2010 se hizo con el premio Max de Honor por su contribución al teatro y en 2010 la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) le otorgó una Medalla de Honor.

Benet i Jornet (Barcelona, 1940) se dio a conocer con Una vella, coneguda olor (1964), obra con la que tuvo su primer reconocimiento, el premio Josep Maria de Segarra de 1963, y en 1970 publica conjuntamente Fantasia per a un auxiliar administratiu y Cançons perdudes. Poco después se volcó en el teatro realista en el que destacan obras como Berenàveu a les fosques (1972), Quan la ràdio parlava de Franco (1979), que escribió mano a mano con Terenci Moix y 'Revolta de bruixes' (1977). Pero el dramaturgo tocó distintos registros, como el teatro infantil con Supertot (1975) o El somni de Bagdad (1977), entre otras. En 1989 estrena en el Teatre Lliure Ai, carai! donde volvería con E. R. (1994), L'habitació del nen (2003) o Dues dones que ballen (2010). Su primera obra estrenada en el Teatre Nacional de Catalunya (TNC) fue Olors, dirigida per Mario Gas en el 2000, y allí volvió con Salamandra (2005);

Televisión

Pero su salto al gran publico llegó de la mano de la televisión. Benet i Jornet fue el creador de la que se considera la primera telenovela emitda en TV3, Poblenou (1993), 1993-94. El éxito fue tan grande que se hizo cargo de muchas otras como Rosa (1995-96), las ya citadas Nissaga de Poder (1996-98); y Laberint d'ombres (1998-00) y otras como Nissaga, l'herència (1999), El cor de la ciutat (2000-2009) y Ventdelplà (2005-2010).

Muy querido por el publico catalán, en 2015, en el TNC le rindió un homenaje en 2015 y, tres años más tarde, su hija, Carlota Benet, recuperó sus memorias recientemente en el ensayo Papitu. El somriure sota el bigoti (Columna).

El mundo de la cultura y de la polítiva han lanzado mensajes de pesar y de recuerdo afectuoso al conocerse la noticia. El director teatral Sergi Belbel lo califica de "padre" de una generación teatral hacia la que fue generoso y heroico porque procedía de una tradición rota por la Guerra Civil. Por su parte, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, destaca que el dramaturgo fue un "renovador del teatro catalán contemporáneo"