Tensión y frustración por no encontrar una pista, indecisión a la hora de tomar decisiones. Así funcionan los juegos de estrategia y misterio en los que se basa el concepto del escape room. Un rompecabezas que tendrá un final feliz si se termina por lograr el objetivo que se persigue. Para aquellos fanáticos de este género, el Joc del Sarró es el plan perfecto para disfrutar en primera persona de este tipo de aventura en Barcelona.
Ubicado en el interior del Poble Espanyol, este singular escape room familiar se basa en una serie de pruebas donde los más pequeños, o las personas de edad más avanzada, deberán trabajar juntos para poder descifrar todos los enigmas. Al entrar, la organización facilitará a los participantes una mochila que contendrá todo lo necesario para superar las adversidades.
Rincones misteriosos en Montjuïc
El recorrido está compuesto por 117 edificios, calles y plazas de toda España, reproducidas a escala real dentro del Poble Espanyol. Con las herramientas de navegación y la guía facilitada, la familia deberá resolver todos aquellos problemas que presentando a lo largo del trayecto. Dentro de la yincana hay dos recorridos diferentes, dependiendo de la edad de los participantes.
Esta actividad perfecta, para colaborar en familia, es para un máximo de cinco personas. El principal objetivo del Joc del Sarró es aprender a observar y visualizar bien todo lo que rodea al recorrido, para así ejercer bien la función de investigadores. El precio del juego es de 33,95 euros e incluye la entrada de forma gratuita durante todo el día al Poble Espanyol.
Un lugar diferente
El Joc del Sarró se puede realizar tanto en castellano como en catalán. También existe la opción de realizarlo en inglés, para mejorar las distintas competencias de la lengua británica. Los niños de 10 años podrán realizar la yincana de forma libre, mientras que los de 3 a 9 años deberán ir acompañados de un mayor de edad.
El Poble Espanyol es una ubicación que rompe estéticamente con lo visto anteriormente en la ciudad de Barcelona. Las obras arquitectónicas más conocidas del territorio español se encuentran representadas en este recinto de pequeñas dimensiones. El Caserío Casa Arteche o la Torre de Utebo son algunas de esas representaciones más características.