La sastrería que hace trajes y camisas a medida por internet

Seis años atrás, Joel Joli --quien confiesa tener problemas para conseguir trajes-- viajó a Shanghái y descubrió un novedoso sistema: una sastrería online. Al volver a Barcelona decidió montar su propio negocio. Los primeros cuatro años trabajó con una página web y luego abrió su primera tienda en Lleida. Este enero inauguran la segunda en Barcelona.

“La idea nació hace seis años por una necesidad propia, porque era muy difícil encontrar camisas y trajes y descubrí en Shanghái que había otra forma”, explica Joli. Pero, ¿cómo es posible que una sastrería funcione sólo por internet? ¿Quién toma las medidas? Uno mismo.

“En la tienda online hay dos opciones muy sencillas. La primera es que enviamos tutoriales por vídeo para introducir las medidas desde un punto hasta otro. Solo se toman una vez y luego el resto de pedidos pueden hacerse con un solo click. La segunda opción es hacer una foto a la etiqueta de una prenda ya adquirida, alguna camisa por ejemplo que nos gusta mucho cómo nos quedaba, y explicamos también qué tener en cuenta para hacer la foto”.

Los fundadores de Blackpier en una de las tiendas / CG

Los fundadores de Blackpier en una de las tiendas / CG  

La parte humana

Joli defiende el modelo online por su practicidad, pero defiende que en la tienda física ofrece "poder sentir los tejidos y recibir asesoramiento". "Hay un aspecto humano".

En cuanto al perfil del cliente, siempre hombres. En su mayoría se trata de “abogados, personas que trabajan en seguros, banqueros o bien para ceremonias como bodas”.

Pero muchos de los clientes son quienes tienen algún problema con las medidas: futbolistas con músculos muy desarrollados, baloncestistas con brazos largos, o personas con papadas a quienes les cuesta conseguir camisas: “Hay más de lo que parece”.

Exterior de la nueva sastrería en Barcelona / CG

Exterior de la nueva sastrería en Barcelona / CG 

Precios, para hombres

Blackpier solo confecciona ropa para hombres, porque considera que es un mercado mucho más rentable, ya que “las mujeres tienen muchas más posibilidades”.

En cuanto a los precios, una prenda como un traje tarda unos 15 días laborables y el precio ronda los 350 euros. Las camisas parten de la base de 59 euros.

Plan de expansión

Actualmente en la compañía trabajan siete personas, dos de ellas en la tienda que acaba de abrir en Barcelona (en calle Muntaner, 383). Damià Castells, socio de Blackpier, asegura que la tienda es “una sastrería moderna que se ha adaptado al momento actual que estamos viviendo”. El negocio online de la compañía sigue creciendo a buen ritmo y de forma orgánica, habiendo vendido ya en estos cinco años en más de 20 países como Alemania, Italia y Reino Unido.

Blackpier tiene definido un plan de expansión que contempla seguir en la misma línea de crecimiento con nuevas aperturas nacionales, ya sea mediante tiendas propias como la ubicada en Lleida o a través de franquicias, como la de Barcelona, en otras grandes ciudades.

Experiencia en tienda física

Comprar por internet es práctico y novedoso, pero acudir a la tienda sigue teniendo lo suyo. En el local de Blackpier se tiene acceso a unas pantallas táctiles, y después de haber escogido entre las más de 1.000 telas expuestas en el establecimiento, el cliente personaliza en línea en vivo su prenda, con los diseñadores 3D. Además, en ese caso, el personal será quien tome las medidas del cliente.

En las tiendas se encuentran muestras de tejido con las que es posible escoger desde el color del interior de la americana, pasando por el cierre de los botones de la camisa y hasta el tipo de bolsillo del pantalón. Personalización al milímetro.