La atractiva oferta teatral de Madrid

Uno de los atractivos clásicos de Madrid para el visitante es su oferta teatral. A pesar de las dificultades económicas que tienen que sortear, sobre todo, las salas y circuitos alternativos, se podría decir que el teatro madrileño goza de una salud envidiable.

La propuesta escénica es desbordante. En 2014, el 34,6% de los 13,7 millones de espectadores que tuvo el teatro en España eran de la Comunidad de Madrid; a Cataluña le correspondió el 17,6%; y a Valencia, el 11,7%.

167 obras en cartelera

Según la página web atrápalo.com, en estos momento en la ciudad de Madrid hay 167 obras en cartelera, mientras que en Barcelona son 71.

Sin embargo, en Madrid el número podría llegar a bordear las 250, entre las de micro teatro y las salas del circuito alternativo que no figuran en la páginas de venta por internet. En Madrid, hay aproximadamente 76 teatros. En Barcelona, 27, según la Guía del Ocio.

La tradición teatral de Madrid se remonta a 1565 cuando Felipe II y el Consejo de Castilla permitieron el establecimiento de una Cofradía de la Sagrada Pasión, para lo cual adquirieron un espacio denominado Corral del Príncipe, donde se empezarían a realizar comedias 17 años después de aquella compra.

El Teatro Español

Ubicado frente a la plaza de Santa Ana, el Teatro Español, en sus más de 430 años de vida, ha visto pasar por sus palcos a reyes, dictadores y figuras de diversos ámbitos de la vida pública. De martes a viernes, a las 12 del mediodía, se pueden hacer visitas guiadas. En abril, el teatro tiene programado dos obras con motivo del IV aniversario de la muerte de Cervantes. Por un lado: Quijote. Femenino. Plural. Y Numancia.

Asimismo, en las salas que el teatro tiene en el Matadero de Madrid, cerca del río Manzanares, conocidas como las Naves del Español, es posible ver obras como La fiesta, drama que cuenta la anodina vida de un matrimonio que en su aniversario número 20 decide hacer una fiesta para celebrarlo.

El Broadway madrileño

Como si fuera una pequeña Broadway, la Gran Vía de Madrid alberga la mayor cantidad de centros comerciales, anuncios publicitarios de neón y, también, numerosas salas de teatro. Entre ellos se encuentra el Teatro de la Luz Phillips Gran Vía con aforo para 850 personas, donde sobre todo se montan monólogos de humor, espectáculos de magia y obras infantiles. Lo mismo ocurre con el Príncipe Gran Vía, con 592 butacas. Lope de Vega, en el número 57, tiene capacidad para 1.100 personas y mantiene en cartelera a El Rey León, que ya ha superado los más de 2 millones de espectadores desde su estreno en 2011.

Los grandes aforos

El teatro Nuevo Apolo, en la plaza de Tirso de Molina, tiene un aforo para más de mil personas y ahora es posible ver el drama Un dios Salvaje de Yasmín Reza, programado hasta el 24 de abril. El Nuevo Teatro Alcalá puede reunir a más de 1.240 espectadores y tiene en cartelera el musical Sister Act.

En el teatro Lara de Malasaña se acaba de estrenar la comedia Todo es mentira, basada en la película de los años 90 del mismo nombre. Todo irá bien acaba de llegar a la sala Fernán Gómez, de la plaza Colón, y cuenta la historia de un grupo de treintañeros que se ha quedado adormecida por culpa de la crisis y no sabe como afrontar lo mucho que todavía les queda de vida.

Viejos escenarios

Inaugurado como cinematógrafo en 1919, el teatro La Latina, es uno de los espacios escénicos más importantes del siglo XX. Ubicado frente al mercado de La Cebada, cuenta ahora mismo con dos obras en cartelera: Viejóvenes, protagonizada por los comediantes Joaquín Reyes y Ernesto Sevilla, y Los vecinos de arriba, de Cesc Gay, donde actúa, entre otros, Candela Peña.

Hay que destacar, asimismo, la escena alternativa, que es quizá, ahora mismo, lo más interesante en cuanto a temática y puesta en escena. Vendría a ser algo así como la vanguardia del teatro español, porque es aquí donde más innovación, originalidad e intensidad se puede encontrar. Sala Cuarta Pared, Triángulo, Escalera de Jacob, Off de la Latina, Teatro del Barrio, El Umbral de Primavera,  Teatro del Pradillo, o Nave 73 son solo algunos de los nombres de estas pequeñas salas que muchas veces tienen que lidiar con las dificultades económicas y la falta de difusión.