David Jiménez, director del periódico 'El Mundo', en la ponencia inaugural del XVII Congreso de Periodismo Digital, en Huesca.

David Jiménez, director del periódico 'El Mundo', en la ponencia inaugural del XVII Congreso de Periodismo Digital, en Huesca.

Creación

David Jiménez: “‘El Mundo’ ya es un medio digital, con una versión impresa”

El director del rotativo abre el XVII Congreso de Periodismo Digital con una encendida defensa de la transformación de los medios clásicos a las nuevas tecnologías

10 marzo, 2016 11:44

El periodismo digital, los medios nativos digitales, la transformación de los antiguos al nuevo entorno ya no es un capricho, ni tan siquiera una voluntad empresarial, sino una necesidad. Es el mensaje que David Jiménez, director de El Mundo, dejó en la inauguración del XVII Congreso de Periodismo Digital que se celebra jueves y viernes en la ciudad de Huesca. 

Es una idea sin grietas, sin posibilidad de discusión, señaló el hombre que se vio en la tesitura de sustituir a una de las vacas sagradas del periodismo español como Pedro J. Ramírez al frente del diario de Unidad Editorial. “Soy un reportero en un puesto dirección. El Mundo es el único diario en el que he trabajado desde que era becario”, espetó Jiménez a un auditorio formado de manera principal por jóvenes periodistas o estudiantes de esta especialidad.

La publicidad cambia de soporte

Pese a ese corto bagaje por otros medios, este barcelonés de 45 años, cuya principal especialización ha sido ejercer la corresponsalía del diario en el área asiática, se mostró taxativo sobre cuál debe ser el futuro del diario que dirige: “El Mundo es ya un medio digital, aunque tenga una versión impresa”. 

Jiménez apoyó su tesis en que en 2015, por primera vez en la historia de su empresa, el incremento de la publicidad digital ha compensado la caída de las campañas de anunciantes dirigidas a la versión en papel del rotativo. 

Inmovilismo periodístico

El periodista se mostró incluso contrariado con la profesión periodística. “Venimos de un negocio que hacía bandera de su inmovilismo --criticó--. La forma de trabajar en las redacciones no varió durante décadas. Hay compañeros instalados en que cualquier tiempo pasado fue mejor”. Su llegada al cargo, de hecho, suscitó muchas dudas: “¿Me han escogido para matar el papel? Eso no se puede decidir desde un despacho, lo deciden los lectores, quienes escogerán cómo quieren acceder a nuestros contenidos. Trataremos de estar en el frente de la innovación. Algunos de los resistentes al cambio tienen una preocupación legítima, son grandes profesionales. Pero hemos de dejar de preguntarnos por lo que hemos sido y mantener la esencia del periodismo”.

El líder del diario El Mundo reivindicó en su ponencia inaugural los valores clásicos del periodismo y abogó por mejorar los contenidos que se ofrecen a las audiencias como único método de sobrevivir en el nuevo contexto comunicativo. “Mientras incorporamos ingenieros a nuestras redacciones debemos seguir molestando al poder, mejorar la edición y reflexionar sobre lo que hacemos con autocrítica, algo que tanto nos cuesta a los periodistas”.