El realizador francés Jacques Rivette ha muerto este viernes en París a los 87 años de edad. Con su fallecimiento desaparece uno de los más destacados directores de la nouvelle vague, el influyente movimiento cinematográfico que despuntó en la década de 1960 en Francia, alrededor de la revista Cahiers du Cinema. Tras la muerte de Rivette, sólo sobrevive Jean Luc Godard ente los principales exponentes de esta corriente.
Rivette, autor de 23 largometrajes entre 1949 y 2009, se mantuvo durante la mayor parte de su carrera en un segundo término tras otros más conocidos represetantes de la nouvelle vague. Pero tuvo sus propios momentos de gloria. Al principio de los 70, destacó por abrazar el experimentalismo con un film de 13 horas de duración, Out 1. Ya en los 90, alcanzó la consideración del gran público con La bella mentirosa –la película que consagró a Emmanuelle Béart–, y con Juana, la virgen, con una Sandrine Bonnaire en pleno apogeo como Juana de Arco.