La realidad virtual de Nesplora se va a pique

El expediente se encuentra en el Juzgado Mercantil número 1 de San Sebastián, que ya lo ha admitido a trámite. Asimismo ha resuelto la apertura de la fase de liquidación y disolución, que implica el cese de la fundadora y administradora Gema Climent Martínez.

Análisis precisos

Así pues, Nesplora Neuroscience está escribiendo sus últimos capítulos como empresa en funcionamiento. Esta iniciativa de alta tecnología se fundó para desarrollar pruebas de evaluación neuropsicológica, por medio de la realidad virtual. Gracias a sus dispositivos se incrementaba la fiabilidad y precisión de los análisis de procesos cognitivos. Así, psicólogos, psiquiatras, neurólodos, pediatras y educadores podían realizar sus diagnósticos y emitir sus evaluaciones con un mejor conocimiento de las circunstancias.

Nesplora se vanagloria de que, desde su lanzamiento, sus tests se han realizado en 24 países y en ellos han tomado parte más de 50.000 personas.

Déficit pertinaz

Esta iniciativa empresarial mereció amplios reportajes periodísticos. Además, la propia fundadora fue designada por la revista Forbes como una de las 50 mujeres más destacadas del mundo tecnológico a escala planetaria en 2018.

Nesplora Neuroscience Support Systems tiene sus instalaciones en San Sebastián. Desde su puesta en marcha en 2008, la empresa no ha conseguido cerrar un solo ejercicio con cifras positivas. Sus ventas tampoco han despegado. En el último lustro, el giro acumulado no llega a un millón de euros.

Inversores

En el capital de Nesplora, además de Gema Climent, participan dos fondos de capital riesgo vascos, BIG Guipozkoa Berrilan y Seed Guipuzkoa, titulares del 5% y 18% respectivamente.

El primero entró en el accionariado en 2010 y el segundo, en 2013, mediante sendas ampliaciones de capital. También tomaron participaciones la firma barcelonesa Taltrade, propiedad de Gregorio Carrillo Lostao, y la vasca El Calero Inversiones, presidida por José Antonio Itarte Zaragüeta.