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El pelotazo que preparan los dueños del Hotel Arts en el Front Marítim de Barcelona se estrenará con el despido de 50 trabajadores.

Será en la discoteca Latin Palace, ubicada en los bajos del mastodóntico edificio, que cerrará el 30 de septiembre de este mes y pasará a manos de los dueños del Arts.

El 1 de octubre se abrirá un expediente de regulación de empleo (ERE) y todos los empleados de la discoteca serán despedidos. 

Después, las grúas entrarán para derribar lo que quede de este templo de la música sudamericana; y lo reformarán por completo, con un concepto de altísimo nivel, pensado para los acaudalados residentes del lujoso hotel. 

Adiós al Latin Palace

El desahucio sobre esta discoteca latina ya está planificado; y sus dueños tendrán que entregar las llaves en dos semanas. El activo está valorado en 13 millones de euros y ha perdido la licencia de operación.

Al fondo de Singapur le pertenece la gestión del frente marítimo tras adjudicarse 24 de los 26 lotes de restaurantes y discotecas subastados en 2020. Ahora, ha pedido hacer uso de ella y Patrimonio del Estado le entregará las llaves del local.

Imagen del Hotel Arts Barcelona (i), cuyos dueños compraron ayer los terrenos junto al litoral / CG

Esta disco de tres alturas ha sobrevivido cinco años a la victoria en la concesión del Arts con la apertura de la mayor discoteca latina de España. Desde su apertura en 2022, ha atraído a grandes nombres de la música latina como Gente de Zona o Blessd. El Latin Palace fue antaño la icónica discoteca Danzatoria y después, Catwalk.

Entre las ideas de los singapureños se encuentra una reforma integral del Casino de Barcelona, pactada con su operador, el grupo Peralada, debido a la baja inversión realizada en los últimos años que ha degradado el local.

También se ha proyectado el traslado de la escultura Pez del multipremiado arquitecto Frank Gehry, que en los últimos 30 años se ha convertido en un icono de Barcelona.

Polo de lujo

Ahora, el Arts quiere lavarle la cara a toda la zona y convertirla en un polo de ocio de lujo, con discotecas y restaurantes de primer nivel y una prolongación del paseo marítimo de la Barceloneta.

Todo ello está pendiente de la aprobación municipal. El Ayuntamiento está revisando la documentación y el plan del Arts, pero aún no se ha pronunciado al respecto.

Decadencia y 'low cost'

La supuesta celeridad en la toma del Frente Marítimo llega después de que el hotel Arts se haya dejado 220 millones de euros en su última reforma, una cifra sin precedentes en los alojamientos turísticos de Barcelona.

La degradación que sufre la zona, poblada del turismo de más bajo nivel, no gusta a los ejecutivos singapureños. Consideran que un hotel de lujo debe estar rodeado de otros activos de lujo

Más rentabilidad

Además, gestionar ellos mismos los locales cercanos al hotel les permitiría aumentar la satisfacción de los clientes. Se les ofrecería un ocio personalizado, con una amplia gama de ofertas de restauración y discotecas pensadas al detalle para ellos. La inversión, que de momento se desconoce, será histórica. Y los primeros damnificados, los propietarios del Latin Palace.

Al cierre de esta edición, el hotel Arts no ha respondido a las preguntas de este medio.