Presentación del Cupra Terramar en Barcelona (Archivo) Europa Press
Seat retrasa la entrada de Cupra en Estados Unidos más allá de 2030
Esta decisión responde a un escenario marcado por el acuerdo arancelario entre la Unión Europea y EEUU, así como por el encarecimiento de los materiales y los cambios en el mix de ventas, entre otros factores
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Seat ha decidido retrasar el desembarco de Cupra en Estados Unidos, previsto para 2030. Según explica la compañía en un comunicado, esta medida responde a los "retos actuales del sector de la automoción" y a "la evolución de las dinámicas del mercado".
Esta decisión estratégica se da en un escenario marcado por el acuerdo arancelario entre la Unión Europea y EEUU, así como por el encarecimiento de los materiales y los cambios en el mix de ventas, entre otros factores.
Sobre esta cuestión, el vicepresidente ejecutivo de Ventas, Marketing y Posventa de Seat, Sven Schuwirth, ha afirmado: "No estamos cancelando, solo posponiendo nuestro lanzamiento en Estados Unidos".
Expansión
Schuwirth también ha indicado que seguirán evaluando los cambios en el mercado en los próximos años "para determinar el mejor momento y enfoque", en línea con los objetivos a largo plazo de la marca.
"Mientras tanto, Cupra aprovehará el fuerte impulso que ha logrado en los territorios clave en los que está presente y pronto se expandirá a nuevos mercados de alto potencial para ampliar su presencia global", ha añadido el directivo.
Mayor rentabilidad
Por otro lado, la compañía --con sede en Martorell (Barcelona)-- se centrará en optimizar el control de costes, proteger la calidad de sus márgenes y aprovechar al máximo el potencial de su gama de modelos, con el objetivo de mejorar la rentabilidad en la segunda mitad del año.
Esta estrategia llega tras la fuerte caída en los resultados de la marca de enero a junio, que se saldó con un beneficio operativo de 38 millones, un 90,6% menos en comparación con en el mismo periodo de 2024.
Según las cuentas conocidas el pasado viernes, los ingresos por ventas descendieron un 2%, hasta los 7.600 millones, mientras que las entregas de vehículos retrocedieron un 6,4%, con un total de 322.000 unidades.
Aranceles al Cupra Tavascan
Volkswagen --que integra las marcas Seat y Cupra-- ya había explicado que la fuerte caída del beneficio se debía al impacto de los aranceles europeos aplicados al modelo Cupra Tavascan, producido en China, además de otros factores, como el aumento de costes y los cambios en la estructura de ventas.
La compañía ha recordado, además, que la reducción temporal y planificada de la producción en Martorell, vinculada a su transformación para fabricar a partir de 2026 los coches eléctricos urbanos del Grupo Volkswagen, ha tenido un impacto adicional.
"Alcanzar una solución"
En una publicación, de Linkedin, el consejero delegado interio de Seat, Markus Haupt, ha afirmado que el primer semestre del año ha demostrado "un entorno desafiante para la empresa, con el aumento de la competencia en el mercado y los aranceles de importación" sobre el Cupra Tavascan.
"Seguimos manteniendo un diálogo constructivo con la Comisión Europea para abordar esta situación y confiamos en alcanzar una solución positiva en un futuro", ha indicado Haupt.
