
El CEO de Puig, Marc Puig, y la Bolsa
Desfase en el salario del CEO de Puig: de los mejor pagados del Ibex 35 con menos facturación y beneficios
La retribución del ejecutivo perfumista se acerca a las que perciben Ignacio Galán (Iberdrola) y Ana Botín (Santander), aunque su empresa factura diez veces menos
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En el ranking de los ejecutivos mejor remunerados del Ibex, sorprende la posición de Marc Puig, presidente y consejero delegado del grupo de perfumería y cosmética Puig, quien percibe un sueldo de 12,8 millones de euros anuales, situándose entre los tres primeros del índice bursátil español.
Su remuneración solo es superada por José Ignacio Sánchez Galán (Iberdrola, 14,1 millones) y Ana Botín (Santander, 13,8 millones), ambos al frente de empresas con una facturación y presencia internacional significativamente mayor.
Iberdrola y Santander facturan mucho más
La cifra contrasta con los resultados financieros del grupo catalán, que en 2023 cerró con una facturación de 4.300 millones de euros, mientras que compañías como Iberdrola, Santander y Telefónica reportan ingresos decenas de veces superiores.
Por ejemplo, Iberdrola facturó más de 40.000 millones, y el Santander superó los 52.000 millones, lo que evidencia una desproporción entre los ingresos del grupo y la retribución de su máximo directivo.
¿Por qué un sueldo tan alto?
Desde Puig argumentan que la elevada remuneración de su CEO responde al fuerte crecimiento de la empresa en los últimos años, así como a su consolidación en el sector del lujo con adquisiciones estratégicas y una ambiciosa expansión internacional.
En 2023, la compañía debutó en bolsa con un gran éxito, consolidándose como una de las grandes firmas europeas del sector de la cosmética y fragancias.
Como si fuera un gigante del Ibex
No obstante, analistas financieros cuestionan la magnitud del sueldo de Puig en relación con la escala de la empresa.
“El modelo de retribución en el Ibex está cada vez más en el punto de mira, y en el caso de Puig es evidente que hay una brecha con respecto a otras grandes multinacionales. La empresa genera mucho menos volumen de negocio, pero paga a su CEO como si estuviera al nivel de un gigante del Ibex”, señala un experto en gobierno corporativo.
Brecha con los empleados y debate sobre la equidad
El caso de Marc Puig se suma al debate sobre la diferencia salarial entre los altos ejecutivos y el resto de la plantilla.
Mientras que el CEO de Iberdrola percibe el equivalente a 168 empleados de su empresa, en el caso de Puig la proporción es incluso mayor, dada la estructura de la compañía y su número de trabajadores.
Más transparencia
En un contexto en el que los inversores y reguladores están exigiendo mayor transparencia y equilibrio en las retribuciones, la situación de Puig podría generar presión para revisar los criterios de remuneración en empresas de menor tamaño relativo.
“En otros mercados, como el estadounidense, los inversores ya están rechazando paquetes salariales excesivos. En España, veremos si ocurre lo mismo en las próximas juntas de accionistas”, concluye el analista.