La cofundadora de HolaLuz Carlota Pi

La cofundadora de HolaLuz Carlota Pi HOLALUZ

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Uno de los hombres de confianza de Carlota Pi abandona Holaluz

Goran Vasiljevic, 'general manager', 'senior advisor' y persona de la máxima confianza de la cúpula, deja la empresa en plena crisis económica y reputacional

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Carlota Pi pierde a uno de sus grandes apoyos en la ejecutiva de HolaluzGoran Vasiljevic, director general, senior advisor y persona de la máxima confianza de la dirigente, ha decidido abandonar la compañía y aventurarse en un nuevo proyecto.

Los motivos de su fuga no están claros. Pero según apuntan fuentes internas a la empresa, el directivo se ha desencantado. Entró en la empresa en enero de 2023, contratado para resarcir la grave crisis en la que cayó Holaluz tras el comienzo de la guerra de Ucrania.

Pero el tiempo ha pasado, la empresa no se ha recuperado y su relación con la dirección se ha enfriado. Por eso, ha decidido abandonar la firma.

La salida de Vasiljevic no se ha comunicado a la plantilla, que se ha enterado del suceso por una publicación de LinkedIn. En ella, el dirigente explica que acaba de crear una nueva empresa, denominada Truefuels.

Ni siquiera se ha despedido públicamente de la firma y explica a este medio que no quiere hacer ninguna declaración oficial sobre su salida.

Trayectoria

Tras su etapa en la comercializadora energética, el directivo se dedicará a crear suplementos de alimentación para deportistas de élite. Vasiljevic, extenista profesional, ha lanzado el producto junto al también deportista Alistair Brownlee, campeón mundial de triatlón.

Los últimos 12 años antes de recalar en Holaluz los pasó en la compañía Lingohr Asset Management, donde alcanzó el cargo de consejero delegado.

Holaluz no detiene la fuga de talento

Su fuga coincide con la de otros 80 empleados de la empresa, que la han abandonado por la eliminación del teletrabajo.

Durante el periodo que Vasiljevic ha ostentado cargo en Holaluz, la compañía ha perdido más de 300 empleados: de las 463 personas de 2023 ya solamente quedan 150. Ha vivido de cerca la caída de la empresa a los infiernos.

Entrada de un fondo desconocido

La salida del directivo también coincide con la entrada en el accionariado de un desconocido fondo con sede en Barcelona, Icosium Investment.

La gestora ha inyectado 22 millones de euros y se ha adjudicado tres sillas del consejo. Es el último desesperado intento de la empresa de salvarse de la quiebra: acumula grandes deudas con entidades bancarias y en los últimos tres años ha pasado de una capitalización bursátil de 257 millones a una de apenas 25.