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Una de las patronales sanitarias representativas ha entrado al choque con el Govern por la licitación de hemodiálisis en Cataluña. Se trata de una de las mayores del mandato de Salvador Illa (PSC), con 414 millones de euros en juego y un máximo de 500. La Associació Catalana d'Entitats de Salut (ACES) ha impugnado el concurso, que ve "discriminatorio". 

Lo ha razonado la directora general de ACES, Anna Zarzosa, quien ha detallado a Crónica Global que el concurso público contiene elementos "bastante graves" que penalizan a los operadores ya establecidos.

Es por ello que la patronal ha recurrido las plicas al Tribunal Catalán de Contratos del Sector Público (TCCSP). El organismo ha detenido el procedimiento y delibera sobre cómo proceder. Mientras, los plazos quedan parados. 

"Desigualdad"

¿Qué critica la patronal? Según Zarzosa, lo mejorable en los pliegos de la licitación son ocho puntos, aunque lo mollar es el "incumplimiento de la normativa" por parte del Servicio Catalán de Salud (CatSalut).

En este sentido, denuncia el "trato desigual" que se daría a los interesados. 

Ofertas 'virtuales'

Es así, razona la directiva, porque el CatSalut prevé ofertas físicas, de operadores establecidos, y dosieres virtuales, de empresas que aún no están presentes en el mercado catalán, pero que quieren establecerse en el mismo. 

Imagen de una área de diálisis en el ICS

A las segundas, además, se les permitirá esperar su acreditación hasta nueve meses. Mientras, el operador anterior continuará prestando servicio. "La media de las autorizaciones sanitarias en Cataluña se encuentra en una horquilla de 18 a 22 meses, por lo que esa ventana temporal se incumplirá". 

"Contraria a ley"

Se cumpla o no, ser adjudicatario sin el visto bueno previo de la Generalitat es "contrario a la legislación autonómica y nacional", detalla la alto cargo. 

Los textos en los dos niveles de gobierno "dejan meridianamente claro que la habilitación legal es necesaria para operar". 

Otros requisitos

A las empresas ya establecidas también se les requiere "comprar, habilitar e instalar un grupo electrógeno eléctrico", algo que no rige para los nuevos interesados. "Agranda la disparidad de trato en la inversión inicial", abunda la directiva. 

En paralelo, se desconfía del peso del precio en las plicas, que alcanza el 43%. "Se presentan las ofertas en sobres cerrados, por lo que las bajas podrían redundar en una peor calidad para el paciente". Y también de la posible aplicación del convenio erróneo y el periodo de pago, que ACES juzga equivocado. 

"Ha habido diálogo"

Pese a esta lista de agravios, que ahora estudia el TCCSP, la patronal tiende la mano al Govern. "Debe quedar claro que dialogamos desde el principio, ya que corregimos juntos algunas cosas", explica Zarzosa. Ahora se impone una enmienda del CatSalut, y hay tiempo, pues la prestación actual "está garantizada hasta fin de año". 

Así, la impugnación del ente empresarial es necesaria, cree la directora general, "porque el concurso público, tal y como está planteado, elimina el riesgo y ventura para algunos y deja sólo la ventura". 

En manos de abogados

Estas críticas ha tratado de razonarlas ACES en su escrito, que firma de puño y letra su máxima directiva, Anna Zarzosa. El documento "se ha trabajado conjuntamente" con la agrupación catalana de Fediálisis (Fundación Española de Diálisis), que se ha apoyado en el abogado Francesc José María, de FJM Advocats, para redactar su propio recurso. 

Diálisis en un hospital público en Cataluña Cedida

También hay un tercer rebatimiento que ha entrado la multinacional alemana de servicios sanitarios B.Braun. "Ha llegado como sorpresa", aseguran. 

Cuentas

Otras fuentes del sector sanitario han hecho su lectura: el concurso de hemodiálisis se ha lanzado "de forma más abierta", invitando a otros operadores, por los peros que le puso la Sindicatura de Cuentas cuando la analizó el año pasado [leer informe aquí]

Esa vía libre se ha interpretado en algunos círculos como un agravio -- el trato desigual que ve ACES- a las empresas que han colaborado históricamente con la Administración. Y de ahí los recursos. 

La Consejería de Salud busca "calidad asistencial"

Cuando presentó el concurso, la Consejería de Salud recordó que se ha estructurado en 18 lotes territoriales para otros tantos centros. Lo ha dotado con 414 millones de euros, ampliables a 498 millones, con el fin de aumentar la "calidad asistencial y la capacidad resolutiva". Cada sesión a los 12.000 pacientes beneficiados costará una media de 220 euros. 

En el mismo sentido, la consejería ha velado para que las plicas "incluyan elementos de sostenibilidad de los centros", y se impulse el "seguimiento y la evaluación del cumplimiento de los contratos". 

Balcells quería internalizarlo

La trifulca por el megacontrato llega en el nuevo escenario de Salud, recuerdan otras fuentes consultadas. Cuando ERC pilotaba el Govern, su conseller del ramo, Manel Balcells, sopesó internalizar el servicio, como intentó con la rehabilitación, y como dejó escrito con el transporte sanitario

Ello es parte del pasado. Ahora, la clave es otra, centrada en la colaboración público-privada. Es en este vértice donde se ha producido el choque Govern-patronal por cómo tiene que producirse esa cooperación. 

Cabe recordar que ACES retiene la mayoría de representación en la red asistencial privada, a diferencia de los dispositivos concertados, donde prepondera la Unió Catalana d'Hospitals (UCH).