Un grupo de trabajadores internacionales de Barcelona, los llamados expats, abre este fin de semana un auténtico templo del placer en pleno Eixample de la Ciudad Condal. Elysium nacerá en el distrito icónico como club "sexual, kinky y hedonista" para practicar las relaciones sexuales en grupo de forma "segura".
El proyecto, capitaneado por un puñado de expatriados, nacerá en el antiguo club Morbo de la calle Diputació, una asociación de alterne gay en grupo que operó durante unos meses a principios de este año, con gran acogida: cosechó cerca de 750 socios en pocos meses.
En septiembre, hubo una ruptura, según explica la misma asociación. Los propietarios rompieron con la asociación gestora y reorientaron el club. De este modo, nacía Elysium.
Sexo en grupo "seguro"
El nuevo concepto no tiene nada que ver con el anterior. El bar de copas será un cocktail bar y zona de juego "segura" en el que practicar relaciones íntimas con el resto de clientes.
El sábado, Elysium se estrenará con Hedonistica, una fiesta sex positive, en la que los participantes beberán cava, cócteles y tendrán fruta fresca para "refrescarse" durante toda la noche.
'Outfit' BDSM
Eso sí, para acceder al espacio se les pedirá llevar un atuendo acorde a la ocasión: cuero o látex propio del mundo BDSM, por sadomasoquismo; lencería o prendas de rejilla.
Los clientes en ropa de calle no podrán entrar y tendrán que cambiarse o comprarse los trajes que se venderán en la entrada.
Intercambio de parejas en el centro
De este modo, los inversores llevarán el intercambio de parejas de la periferia de Barcelona al centro de la urbe. Hasta ahora, los clubes destacados de este terreno se situaban en Pedralbes (Training) y Sarrià (Oops!).
Ello cambiará. Los promotores sitúan una sala sexual inclusiva -pero de orientación heterosexual- en pleno Gaixample, donde ya operan otros clubes de la misma índole pero orientados al público gay. Son, por ejemplo, las saunas del barrio arcoíris, o los icónicos Open Mind y Berlin Dark, o los más nuevos Boyberry, Men Factory, Rectum o Imperial, un club cultural-erótico de inspiración londindense.
Desconfianza del ocio nocturno
Eso sí, la proliferación de clubes para revolcarse con otros clientes no gusta a todo el mundo. Parte del ocio nocturno afea a estos promotores que esquiven las rígidas normativas que hay en los locales de hostelería al constituirse como asociaciones.
Ello, el hecho de ser una agrupación de socios, les permite "menos rigidez" con las aperturas, aforo o venta de bebidas.
Guerra en el gran club de 'swingers'
En el terreno estrictamente swinger, la apertura de Elysium en pleno Eixample de Barcelona significa dos cosas. Una, que la Ciudad Condal se confirma como capital del intercambio de parejas en el sur de Europa, como explicó este medio.
Y dos, que el sector se revitaliza tras la crisis en la que se sumió Oops!, el mayor club del ramo, situado en la elegante calle Anglí de Sarrià. Como avanzó Crónica Global, el chalet erótico-monumental se ha sumido en una guerra entre socios que ha terminado judicializado.
Uno de los exsocios acusa al resto de quedarse con la operativa del negocio y de "estafarle". Sostiene que tiene "pruebas de todo" y que hablará cuando se resuelva el pleito judicial que ha interpuesto.