Terraza de la discoteca Opium Barcelona
Las discotecas del Frente Marítimo y Barcelona 'sellan' su paz: el CSIC convivirá con Opium, Pachá y Shoko
- La ampliación del centro de investigación se realizará en unas naves abandonadas del Port Olímpic y no afectará a las discotecas del litoral barcelonés
- Otras informaciones: Barcelona invertirá 150 millones en un parque urbano que transformará el litoral
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Barcelona y las discotecas del Frente Marítimo sellan su paz. La ampliación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) finalmente no barrerá a Opium, Pachá y Shoko, tal y como estaba previsto, según ha explicado este martes el Ayuntamiento de la capital catalana.
El Institut de Ciències del Mar-CSIC se ubicará en unas naves en desuso entre el Port Olímpic y la playa de Somorrostro. Contará con 3.000 metros cuadrados, llevará el nombre de Barcelona, Mar de Ciència y su habilitación supondrá un desembolso de 30 millones de euros.
Enterrado el viejo acuerdo
Anteriormente, estaba pactado un acuerdo que preveía que el CSIC se instalara en los 2.565 metros cuadrados de Opium; y en una fase posterior se cedieran también los dos contiguos --Shoko y CDLC--, que ocupan 690 y 1.075 metros cuadrados, respectivamente.
Ahora, las obras comenzarán en 2026 y las puertas del nuevo espacio se abrirán un año más tarde a todo el público. En él, se ofrecerán exposiciones, experiencias inmersivas, talleres, debates, formación y proyecciones audiovisuales, con la idea de "aumentar el compromiso con el océano y concienciar a la ciudadanía sobre los avances de la ciencia".
Proyecto de Colau tumbado por el PSC
La ampliación del CSIC la blindó Ada Colau, partidaria de no renovar las concesiones de Opium, Pachá y Shoko, entre otras. Ahora, el movimiento cuenta con el vistobueno del Ayuntamiento de Collboni, pero también con el beneplácito del Gobierno de España, pues las licencias de las discotecas del Frente Marítimo son titularidad del Ministerio de Hacienda.
150 millones para el litoral de Barcelona
La noticia se enmarca en una inversión pública de 150 millones de euros destinada a transformar el litoral barcelonés con la construcción de un parque urbano que irá desde la playa de la Mar Bella hasta el Fórum.
También se ha proyectado una inversión de 56 millones en un nuevo parque tecnológico en los terrenos del museo Hermitage, así como otro desembolso de 56 millones en el denominado BlueTech Port, un plan que prevé abrir seis naves de los Tinglados de Sant Bertran, con un total de 25.000 metros cuadrados, para ubicar empresas e innovación vinculada al mar. El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha explicado que "esta es una transformación que ha traído la Copa América", pues había diversos proyectos encallados que la competición ha avivado, con la intención de promocionar la economía azul.
