El Rey ensalza el "papel de los empresarios" para superar los desafíos globales

El rey Felipe VI ha clausurado el congreso CEDE, celebrado este jueves en Granada, con una reivindicación del empresariado como garantes del progreso económico y social. Máxime en un ambiente de desconcierto global provocado por los conflictos abiertos en Ucrania y Oriente Próximo y el avance del proteccionismo y las barreras comerciales.

"Este agravamiento de la incertidumbre global en los últimos tiempos, hace que el papel de los empresarios y, en particular, de los directivos de las empresas, sea, si cabe, mucho más importante", ha expresado el jefe de Estado, que no se ha perdido ninguna cita del club de directivos desde su primera edición.

Nuevo liderazgo

"De vosotros depende la excelente y responsable gestión de los recursos humanos y materiales de una empresa. Y, de esa buena gestión como directivos dependen económica y socialmente muchas familias", ha manifestado.

El rey ha hecho hincapié en el nuevo liderazgo de los directivos, un guiño al título del congreso organizado por CEDE. Asuntos como la sostenibilidad, la inteligencia artificial y la transformación interna de las empresas ha marcado la agenda de la jornada.

El rey Felipe VI junto al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno (3i), y la vicepresidenta del Gobierno, Nadia Calviño (3d), a su llegada al acto de clausura del XXII Congreso CEDE EFE

Flexibilidad y agilidad

En un contexto en que "el orden internacional basado en los principios de apertura y multilateralismo que conocemos desde hace muchos años se está debilitando", Felipe VI ha abogado por "nuevos modelos organizativos, más ágiles, flexibles y adaptativos".

En definitiva, modelos donde la "innovación" marque la gestión de las empresas en aras del "objetivo final" de "convertir a la economía española en una economía más competitiva y flexible".

Industrialización estratégica

El monarca ha advertido de que "la fragmentación de la economía global no es deseable ni buena para nadie". Por ello, ha defendido una reindustrialización estratégica: "Trabajando de forma simultánea y equilibrada reduciendo determinadas dependencias externas y fortaleciendo nuestras capacidades productivas estratégicas, mientras defendemos, al mismo tiempo, una economía global abierta", ha añadido.

El rey ha cerrado su intervención elogiando de nuevo a los empresarios: "Sé que en España contamos con unos directivos de excelencia. Confiamos en vosotros y os animamos a seguir trabajando por y para el bien de nuestra sociedad".