El conseller de Empresa y Trabajo de la Generalitat de Cataluña, Roger Torrent, vendió este miércoles un aumento del presupuesto destinado a Formación Profesional (FP) ocupacional dual. Eso es, la contratación a través del Servei d'Ocupació de Cataluña (SOC) de personas que, durante 12 meses, compaginan los estudios teóricos en los centros con el desarrollo en el entorno profesional. Todo ello gracias a una nueva convocatoria de ayudas que beneficiará a 1.500 personas más respecto a las últimas ediciones, una cantidad que los sindicatos ven "insuficiente".
Las fuentes consultadas por Crónica Global acusan al Govern de ser "poco ambicioso" en cuestiones de Formación Profesional. Más todavía si se tiene en cuenta que las matriculaciones han aumentado un 30% en cinco años, según datos del Ministerio de Educación y Formación Profesional.
Un presupuesto mayor, pero insuficiente
Tal y como anunció el conseller, el SOC ha abierto la tercera convocatoria del programa de Formación Profesional para la Ocupación en Formato Dual (FPO Dual), y para la que se ha asignado un presupuesto un 32% mayor, alcanzando los 33 millones de euros. Estos fondos permitirán llegar a 1.500 personas, que se sumarán a las 3.500 beneficiadas en años anteriores. Pese a que es un avance positivo, las mismas voces advierten de que el Govern debería apostar "más decididamente" por la FP. Especialmente la ocupacional, donde "a través de la dualidad pueden desarrollar mejor sus competencias profesionales", dice Jesús Martín, portavoz de UGT.
Los más críticos consideran que 1.500 personas no es una cifra lo suficientemente ambiciosa teniendo en cuenta el compromiso declarado por la Generalitat de que esta sea "la legislatura de la FP". En este sentido, recuerdan que la modalidad dual es "la solución", ya que su nivel de inserción laboral es mucho más alto, así como también lo es el nivel de finalización de los estudios.
Por ello, Xavier Pérez, de CCOO, ve imprescindible incrementar las posibilidades de la gente a formarse profesionalmente: "Tenemos un porcentaje muy alto de trabajadores no cualificados y de gente parada sin certificación profesional", asegura en una conversación con este medio, donde advierte de que "Cataluña está muy por detrás de lo que necesita".
Un departamento exclusivo para la FP
Para los sindicatos también es necesario que la Formación Profesional (FP) se aborde desde un único departamento, ya que actualmente son dos consejerías -Educación y Empresa- las que lo gestionan, provocando a veces un exceso de burocracia. En este sentido, Martín recuerda que la "FP va dirigida a público que va desde los estudios postobligatorios hasta la edad de jubilación. Si además le sumamos las personas que cursan FP de grado básico [que tienen entre 14 y 16 años], podemos ver que la dimensión es enorme, por lo que se debería crear un departamento exclusivo", agrega.
Así sería más sencillo, dice, llevar a cabo las convalidaciones de las formaciones y equivalencias de certificados de profesionalidad que se hacen en el SOC.
Por su parte, Pérez también ha cargado contra la consellera de Educación de la Generalitat, Anna Simó, quien debería tomar ejemplo de Torrent e incrementar los recursos en la FP -en este caso, en los grados medios y superiores-. Esa sería una forma para prevenir que, los que cursan FP inicial, no lleguen a necesitar la FP ocupacional. "Si nadie se queda fuera, nos ahorramos tener que ir dando nuevas oportunidades cuando son más mayores", recalca.
836 empresas en el programa
Sea como sea, desde la parte social ven que la iniciativa de Empresa va en la buena dirección, ya que además involucra a los sectores empresariales generadores de ocupación para formar y cualificar a futuros trabajadores en la empresa donde se realizan las prácticas. Según el dato aportado por la conselleria, en las dos anteriores ediciones han participado 836 compañías de toda Cataluña, y todas ellas han valorado "la adaptabilidad que tiene al mundo laboral y a las necesidades reales de las empresas del programa".
Por último, los sindicatos celebran que se amplíe el público al que va dirigida la ayuda. No sólo se beneficiarán las personas entre 16 y 29 años, sino también los mayores de 29 en riesgo de exclusión social, los mayores de 45 que estén en paro de larga duración y las personas con discapacidad o trastorno mental, para las que se les reserva tres millones del presupuesto total. "Es un avance, aunque todavía insuficiente", concluyen.