ACS desafía lo 'imposible' al reconectar La Palma con una carretera pionera sobre la lava
Dragados restituye en solo un año la conexión en el valle de Aridane tras la erupción del volcán de Cumbre Vieja. Es un desafío sin precedentes que se ha cimentado, además, en la sostenibilidad
La erupción del ahora conocido como volcán Tajogaite, en el Parque Natural de Cumbre Vieja, en la isla canaria de La Palma, tuvo a España en vilo entre el 19 de septiembre y el 13 de diciembre del 2021. Fueron 85 días en los que este episodio de la naturaleza centró toda la atención informativa y tuvo con el corazón en un puño a los vecinos de esta parte del archipiélago. Según datos del Cabildo insular, la lava sepultó 1.200 hectáreas, afectó a cerca de 1.700 edificaciones, las vías de comunicación quedaron enterradas y 7.000 personas fueron evacuadas. Muchas de ellas lo perdieron todo.
El volcán causó serios destrozos en el valle de Aridane, dejando algunos municipios totalmente aislados, por lo que la reconexión precisaba de una actuación veloz e innovadora. Y de ella se ha encargado Dragados, filial de ACS, que en apenas un año ha construido una carretera pionera y sostenible sobre un terreno que llegó a alcanzar los 350ºC. Es precisamente esta urgencia por restituir la movilidad en la isla lo que llevó al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MITMA) a decretarla y adjudicarla como obra de emergencia. Nunca antes se había acometido un proyecto de estas características, pero el esfuerzo ha merecido la pena: La Palma vuelve a activarse y a recuperar su movilidad.
Imágenes aéreas de la superfície de trabajo y la colada emitida por el volcán
Una conexión especial
El delegado de la filial de ACS en Canarias, José Luis Rodríguez, explica que solo Dragados podía realizar esta obra. Y no solo por su trayectoria y sus conocimientos, sino por el arraigo de la compañía con el territorio. Desde su nacimiento, la constructora ha estado presente en la isla, contribuyendo a su crecimiento y desarrollando algunos de sus proyectos más emblemáticos, como el telescopio Grantecan, el más grande del mundo. Por si fuera poco, la compañía ha generado empleo local y ha fomentado la colaboración entre empresas de la isla, fortaleciendo una economía que se vuelve a reactivar.
Una conexión especial
El delegado de la filial de ACS en Canarias, José Luis Rodríguez, explica que solo Dragados podía realizar esta obra. Y no solo por su trayectoria y sus conocimientos, sino por el arraigo de la compañía con el territorio. Desde su nacimiento, la constructora ha estado presente en la isla, contribuyendo a su crecimiento y desarrollando algunos de sus proyectos más emblemáticos, como el telescopio Grantecan, el más grande del mundo. Por si fuera poco, la compañía ha generado empleo local y ha fomentado la colaboración entre empresas de la isla, fortaleciendo una economía que se vuelve a reactivar.
Imágenes aéreas de la superfície de trabajo y la colada emitida por el volcán
Innovación y drones al servicio de la seguridad
La nueva carretera tiene una longitud de casi 4 kilómetros, de los que 2,3 kilómetros discurren sobre coladas de lava. En situaciones parecidas, la estrategia habitual consistía en levantar pistas de tierra para restaurar la conexión lo antes posible, pero Dragados ha ido un paso más allá y ha construido una carretera convencional (pero distinta a todas) de 70 kilómetros por hora sobre el magma solidificado para una carga de tráfico estimada de 22.000 vehículos diarios. Además, esta vía mejorará el acceso a plantaciones y viviendas aisladas por la erupción. Ha sido un desafío sin precedentes.
Las peculiares condiciones del terreno, junto con la emisión de gases y las altas temperaturas, exigieron cuidar al máximo los estándares de seguridad. Así, además de dotar de una capacitación especial a los equipos, se realizó una termografía de toda la colada y diversas campañas de reconocimiento geofísico y geotécnico, pues uno de los grandes riesgos del proyecto era la inestabilidad del terreno.
Los tubos o cavidades lávicas constituían uno de los principales riesgos, puesto que Dragados necesitaba introducir maquinaria pesada en un terreno frágil; la lava se había solidificado en su corteza exterior, pero en el interior de la colada todavía existían áreas en las que fluía, por lo que los estudios de georradar para determinar estas cavidades fueron imprescindibles para la seguridad y el éxito del proyecto.
Dragados superó este escollo gracias a su liderazgo y apuesta en materia de innovación y digitalización, pues los drones se convirtieron en su principal aliado para salvar estas dificultades.
Tomas de temperatura constante sobre el nuevo suelo de origen volcanico
Sostenibilidad sobre lava
Pero, además, la constructora ha tenido en cuenta la sostenibilidad para este complicado proyecto. Pilar Segura, jefa de materiales de Dragados, explica que se ha optado por la reutilización de los recursos pétreos provenientes de la erupción para obtener el hormigón, levantar terraplenes y realizar rellenos, lo que ha reducido la necesidad de extracción de nuevos recursos y ha disminuido la huella de carbono asociada al proyecto. En este sentido, también se han empleado mezclas que resisten altas temperaturas. Asimismo, la carretera discurre por un paraje protegido por su valor ambiental, por lo que los trabajos han cuidado el ecosistema, han minimizado el impacto y han promovido la recuperación del entorno natural. Con este proyecto, Dragados ha ido un paso más allá. La nueva carretera de La Palma, construida sobre una colada de lava y en un terreno que ha llegado a registrar temperaturas superiores a los 350ºC no solo se ha convertido en un prodigio de la innovación y la sostenibilidad, sino que va a sentar un nuevo precedente en el mundo de la construcción al ser la primera vez que se realiza un proyecto así. Se trata, en definitiva, de una de las obras más especiales del Grupo ACS.
Sostenibilidad sobre lava
Pero, además, la constructora ha tenido en cuenta la sostenibilidad para este complicado proyecto. Pilar Segura, jefa de materiales de Dragados, explica que se ha optado por la reutilización de los recursos pétreos provenientes de la erupción para obtener el hormigón, levantar terraplenes y realizar rellenos, lo que ha reducido la necesidad de extracción de nuevos recursos y ha disminuido la huella de carbono asociada al proyecto. En este sentido, también se han empleado mezclas que resisten altas temperaturas. Asimismo, la carretera discurre por un paraje protegido por su valor ambiental, por lo que los trabajos han cuidado el ecosistema, han minimizado el impacto y han promovido la recuperación del entorno natural. Con este proyecto, Dragados ha ido un paso más allá. La nueva carretera de La Palma, construida sobre una colada de lava y en un terreno que ha llegado a registrar temperaturas superiores a los 350ºC no solo se ha convertido en un prodigio de la innovación y la sostenibilidad, sino que va a sentar un nuevo precedente en el mundo de la construcción al ser la primera vez que se realiza un proyecto así. Se trata, en definitiva, de una de las obras más especiales del Grupo ACS.
Tomas de temperatura constante sobre el nuevo suelo de origen volcanico