La plataforma de soluciones de pago Sequra, con sede en Barcelona, lanzará en los próximos meses un spin-off enfocado al sector de la óptica. Lo hará con un gancho comercial disruptivo: adquirir unas gafas bajo un modelo de suscripción.
La fintech entrará en este segmento replicando un modelo que ya ha demostrado su éxito en los mercados nórdicos, como ha avanzado Adrián Escudé, chief revenue officer (director de ingresos) de la empresa. Precisamente, el fundador y consejero delegado de Sequra, David Bäckström, tiene origen sueco.
Optiqa, nuevo 'spin-off'
"Por una pequeña cuota mensual se podrá acceder a los pares de gafas que se necesiten. Así se podrán cambiar las gafas una vez al año cuando se quiera o, si te cambia la vista, cambiar los cristales sin problemas con la montura", ha detallado Escudé.
La propuesta también dará respuesta a las personas que necesitan anteojos para actividades especiales, como la práctica de deporte o la afición al montañismo. La denominación del nuevo proyecto será Optiqa.
Impulso de las ventas
Tras consolidar su software de pago a crédito, que actualmente está integrado en unos 5.000 comercios electrónicos, la empresa ha trasladado que prevé cerrar 2023 con unas ventas superiores a los 53 millones de euros. Su tecnología BNPL --siglas en inglés de 'compra ahora y paga después'-- opera en e-commerces de 15 sectores distintos. Uno de sus principales nichos es el educativo, pero también están presentes en moda, salud y electrónica, entre otros.
Entre abril y junio de este año, la compañía ha reportado un incremento interanual del 54% en los ingresos. En este periodo, su resultado operativo (ebitda) ha mejorado un 58% respecto al ejercicio anterior, mientras que la adquisición de compradores ha crecido un 63%.
Mejora de la tecnología
Durante los últimos dos trimestres, Sequra se ha centrado en la optimización de su algoritmo de inteligencia artificial para el scoring de riesgo y la reducción de los abandonos en el proceso de compra.
La fintech ofrece en tiempo real una puntuación sobre la viabilidad crediticia del comprador, a partir de la cual se generan distintas opciones de pago a la medida de cada usuario. Esto distingue Sequra de otros competidores que modulan mucho menos las posibilidades de pago a crédito.
Dobla plantilla
La compañía abrió en febrero del año pasado un centro de innovación en sus oficinas ubicadas en el número 7 de la calle Alí Bei de Barcelona, que cuentan con 2.700 metros distribuidos en varias plantas.
La apertura de este nodo tecnológico ha impulsado la contratación de personal, que prácticamente se ha doblado hasta alcanzar cerca de 300 trabajadores.
Foco en el sur de Europa
Pese a los planes anunciados en el pasado, Sequra no prevé abrir nuevos mercados a corto plazo, sino reforzarse en el sur de Europa, como ha incidido Escudé.
Respecto a la financiación, la plataforma de pagos ha firmado en los dos últimos años sendas alianzas con el banco sueco Svea y la gestora británcia Chenavari, por lo que no prevé recurrir a ampliaciones de capital.