El Círculo de Economía pide poner punto y final a la forma en que se ha gobernado Barcelona en los últimos ocho años. Sin nombrar de forma directa ni a la alcaldesa, Ada Colau, ni a su partido, la junta directiva presidida por Jaume Guardiola reclama un nuevo liderazgo para el Ayuntamiento de Barcelona que “comprometa el máximo de actores posibles” y “reconstruya la maltrecha alianza entre el Ayuntamiento y el sector privado, como también con el resto de administraciones , el tercer sector y la sociedad civil”.
A seis días de las elecciones municipales y a una semana de su reunión anual, el lobby de economía deja claro que el nuevo equipo de Gobierno “tiene que dejar de obstaculizar la alianza público-privada” en la capital catalana. Recuerda que “se ha demostrado que las condiciones de vida del conjunto de la ciudadanía mejoran cuando esta relación es leal y confiada”. “En democracia, el consenso es garantía de eficiencia para hoy y para mañana”, sentencia.
Un nuevo Eixample sin consenso
Critica que cambios de calado como la transformación de la trama del Eixample con las superislas y los ejes verdes “se haya llevado a cabo sin el consenso necesario y con una dotación insuficiente de transporte público que suponga una alternativa para los ciudadanos de la corona metropolitana”. Y es que el Círculo exige abordar este tipo de debates con la visión de la llamada gran Barcelona, con todas las ciudades de su entorno, y sin apriorismos.
“Hay que huir del dogmatismo que pretende que el sector público lo puede todo”, señala la nota de opinión, “o que el mercado solucionará por sí solo los problemas de manera satisfactoria”. Añade de esta forma una crítica a los postulados más radicales del liberalismo y apuesta por una “colaboración estrecha entre el Ayuntamiento y el sector privado” que tenga lugar en un “entorno estable y de confianza mutua”.
Ampliación del aeropuerto
Además de reclamar “más debate, análisis y consenso” para emprender acciones que impliquen cambios tan sustanciales para Barcelona como son dar carpetazo al Plan Cerdà, el Círculo de Economía pide que el nuevo proyecto político que lidere Barcelona sea a largo plazo --“que trascienda el ciclo electoral para que tapar boquetes ahora no suponga que se abran agujeros mayores más adelante”-- y que impulse iniciativas que sean “movilizadoras y generen ilusión”.
En cuanto a los grandes retos de futuro, pide un “replanteamiento en la cuestión del aeropuerto”. El lobby empresarial es partidario de ampliar las instalaciones de El Prat-Josep Tarradellas mediante un debate con “rigor” y que consiga “hacer compatible tanto la apuesta por mejorar una infraestructura estratégica como una política pública comprometida con la protección de un espacio natural amenazado”.
Fin de la “década perdida”
De nuevo, demanda acabar con los dogmatismos y señala de forma clara que es la “Generalitat de Cataluña la que tiene que ejercer el liderazgo”. En este sentido, el Círculo de Economía celebra que se haya acabado con el procés. “Superada la década perdida, con un gobierno que ejecuta un meritorio giro pragmático y una oposición que apuesta por superar la dinámica de bloques, es la hora de que el autogobierno recupere su autoridad”, celebra.
Y eso, para el empresariado catalán, pasa de forma indudable por “priorizar la gestión y mejorar las políticas públicas en asuntos clave”. “Gestión no implica dejar de plantear demandas que son consensuadas por el grueso de la sociedad catalana, tanto por lo que respecta al modelo de financiación como a la reivindicación de más cuotas de autogobierno”, señala la nota de opinión, pero deja claro que “gestión de calidad significa liderazgo político, y en los últimos años hemos estado demasiados faltos de él”.
Jaume Guardiola y Miquel Nadal
En su segunda nota de opinión como presidente, Jaume Guardiola lamenta que esta falta de ambición y liderazgo político también se da tanto a nivel español como europeo y exige la búsqueda de grandes consensos para sacar rédito de una “cohesión interna” que es necesaria.
En su elaboración se nota la mano del nuevo director general del Círculo de Economía, Miquel Nadal, y se reivindica el papel del lobby empresarial para “participar del debate público identificando los retos y fijando las prioridades de una sociedad en la que reducir las desigualdades solo es posible si se crean las condiciones para el crecimiento económico”. “Queremos entender el presente para reactivar el futuro”, sentencia la nota de opinión que marcará el sentido de lo debates de la reunión anual que empezará el lunes 29 de mayo en el Hotel W de Barcelona.