El sector agroalimentario incrementa su apuesta por la transformación digital y la tecnología para dar respuesta a sus grandes desafíos. Entre ellos, el cambio climático, la agroindustrialización, la seguridad alimentaria, la logística o la capacitación y el relevo generacional, según revelan los datos del informe Las tendencias en la alimentación en Agritech y FoodTech en 2023, elaborado por la Fundación Europea para la innovación y aplicación de la Tecnología (Intec) y Minsait (Indra).
Según dicho estudio, España es ya el cuarto país europeo que más invierte en startups agroalimentarias. El pasado año aumentó un 69,5% la inversión en estas empresas con respecto a 2021, siendo además el 14% del total de las operaciones de inversión en startups del país.
Además, en España existen 459 startups dedicadas al sector, un 8% más que en 2021, que han creado 1.470 empleos, lo que demuestra el potencial del sector agroalimentario para generar nuevo empleo y contribuir a la mejora del sector y crecimiento económico del país.
Tecnología
Como en otros sectores, la innovación digital es una pieza clave para que la cadena agroalimentaria siga creciendo. El informe destaca el avance en transformación digital a nivel global, ya que su inversión ha seguido creciendo por encima del 10% respecto a años anteriores.
Esta inversión se traduce en un avance hacia la implementación de nuevas plataformas de precisión que facilitan más seguridad alimentaria y una mayor trazabilidad a través de la utilización de análisis de Big Data y control de datos, como el nivel de plagas, la maduración de los frutos, los niveles de agua o la humedad.
Inteligencia artificial
El informe también refleja la relevancia que está adquiriendo el uso de inteligencia artificial (IA) en el sector, ya que prevé que su uso crezca un 30% a lo largo del año. La IA permitiría, entre otras cosas, monitorizar y predecir el clima para mitigar los impactos de sequías, granizo e inundaciones, mejorando así la eficiencia y la sostenibilidad en la producción agrícola. En la misma línea, la introducción de robótica en la gestión de las plantaciones y granjas facilita la eficiencia y el ahorro en costes, que combinada con la inteligencia artificial y cámaras espectrales será una práctica cada vez más habitual en la recogida de alimentos.
La aplicación de todas estas tecnologías avanzadas da respuesta al reto de la agroindustrialización, para el que Minsait ofrece a las compañías del sector tecnología como drones, sensores o análisis de datos que favorecen la eficiencia en la producción y reducen el uso de recursos, además de preservar en el caso de la ganadería, la salud animal y su bienestar.
Relevo generacional
Desde hace años la agricultura y la ganadería se enfrentan a la falta de relevo generacional, la cual afecta directamente a la escasez de mano de obra del sector. Para minimizar esta problemática, Minsait impulsa un modelo de territorio rural inteligente que engloba la adopción de tecnologías y prácticas sostenibles, así como la promoción de la comercialización de proximidad y el intercambio de recursos entre productores mediante la automatización y la robótica avanzada.
Este nuevo modelo operativo también contempla el uso de tecnologías como la automatización y la robótica avanzada con el objetivo de mejorar y aumentar la producción y los ingresos a lo largo de la cadena de suministro de alimentos.
Sostenibilidad
Otras claves que recoge el estudio son la importancia de la sostenibilidad, con medidas para reducir los aproximadamente 1.300 millones de toneladas de alimentos que se desperdician al año, así como la nueva tendencia de convertir los residuos en combustible y abonos orgánicos. Apostar por soluciones tecnológicas que mejoren la eficiencia energética mediante la sustitución de la energía eléctrica por renovables haría que el impacto medioambiental se reduzca enormemente.
Por lo que respecta a la logística, será más sostenible y eficiente a través de la implementación del internet de las cosas (IoT), inteligencia artificial y el uso de la nube, que permitirían una visión global en tiempo real de toda la cadena de suministro.
Respecto a los productos agroalimentarios, los nuevos hábitos de consumo hacia un estilo de vida más saludable reclaman mayor innovación en productos no procesados, bebidas vegetales y proteínas alternativas avanzadas derivadas de vegetales, insectos y de productos del mar que den lugar a carne vegana y cultivada