La catalana Pure Tech lanza al mercado su solución industrial para absorber CO2

La compañía con sede en Barcelona, fundada en 2017 por Aldo Sollazzo, lleva años investigando y validando una gama de materiales --entre otras instituciones, con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y el Instituto Valenciano de Microbiología-- para contribuir a la sostenibilidad empresarial. Ahora, iniciará una fase comercial para captar clientes en sectores como el papelero, la construcción y el textil.

Aire más limpio

En conversación con Crónica Global, el emprendedor ha explicado que Pure Tech está formada por "una familia de aplicaciones que absorben gases de efecto invernadero y los convierten en cantidades muy pequeñas de carbonatos y nitritos inertes".

Los aditivos creados por la empresa actúan como una suerte de revestimientos aptos para barnizar la madera, pintar distintos materiales de construcción o integrarse en las fibras de los tejidos. Mediante su uso se neutraliza la contaminación atmosférica provocada por los gases generados durante los procesos industriales.

Aldo Sollazzo, fundador de Pure Tech / CEDIDA

Nuevos contratos

A diferencia de sus competidores, el proceso de mineralización desencadenado por Pure Tech no necesita luz y tiene una "elevada capacidad regenerativa", según su fundador. Además, Sollazzo subraya el valor marginal de la innovación en el conjunto de costes sopesados por las corporaciones.

Por el momento, la compañía ya ha firmado un contrato con un fabricante de artículos profesionales de peluquería. Además, ultima otros acuerdos con un par de grandes marcas textiles. En el caso de la industria de la ropa, la compañía pone cifras: 10 millones de camisetas fabricadas con Pure Tech ahorran 2.070 toneladas de CO2.

Sede de 1.000 metros

Pure Tech es una de las tres ramas del grupo Noumena impulsado por Sollazzo. Al margen de la firma de aditivos sostenibles, el grupo consta de otras dos iniciativas en el ámbito de la impresión 3D y del análisis espacial.

Actualmente, todos los negocios tienen su sede en una nave de 1.000 metros cuadrados cerca del Fòrum y emplean a unos 30 trabajadores.