Puig ha abordado una reestructuración en profundidad de todos sus negocios. Como ha adelantado Expansión, el grupo de perfumería y cosmética presidido por Marc Puig ha agrupado todas sus mercantiles bajo una única sociedad anónima, Puig Brands SA.
El proceso de reordenación ha transformado la sociedad anónima Jorba Perfumes en su nueva matriz, en vez de la sociedad limitada Puig, que actualmente ejercía como cabecera de la compañía. La información vincula esta operación con una posible salida a bolsa del grupo, que sin embargo ha sido desmentido por la empresa al mismo rotativo.
Ampliación de capital
A su vez, Jorba Perfumes ha cambiado su denominación a Puig Brands y ha cerrado una ampliación de capital no dineraria por un importe de 29,30 millones de euros, hasta elevar su capital social en 144 millones.
Además, ha ejecutado un conjunto de modificaciones estatuarias en capítulos como el número y el nominal de las acciones, la creación de clases de títulos, la transmisión de estos y los derechos que confieren a sus titulares, el funcionamiento del consejo de administración y la aplicación del resultado.
Resultados récord
La transformación societaria se ha conocido pocas semanas después de que el consejo de administración de Puig diera entrada a tres vocales ajenos a la saga familiar. La incorporación de Nicolas Mirzayantz, Christine Mei y Ángeles Garcia-Poveda configura un órgano de gobierno con solo cinco miembros de 14 pertenecientes a la familia fundadora.
En 2022, la perfumera obtuvo un beneficio neto de 400 millones de euros, un 71% más que en 2021, y unos ingresos netos de 3.620 millones, lo que supone un incremento del 40%. Se trata de unos resultados récord para la compañía que baten a los del año pasado, que ya fueron los mejores de su historia.