Cataluña tendrá un relevante protagonismo en la etapa que el gigante textil Inditex inicia a partir de este año, en la estrategia que la compañía ha denominado “al siguiente nivel”, tras registrar en el ejercicio fiscal 2022 los mejores resultados de su historia. Las buenas noticias recaen sobre todo en Tordera y Sallent, las localidades barcelonesas que albergan sendos centros logísticos del grupo domiciliado en Arteixo (La Coruña).

Hacia ellos se irá una parte relevante de los 1.600 millones de euros que Inditex planea invertir durante el ejercicio para potenciar sus principales líneas de actuación, una de las cuales es la propuesta de moda.

Centros de Bershka y Stradivarius

Dos de los grandes centros de distribución de Inditex se encuentran en Cataluña y están destinado a dos de la enseñas del grupo que complementan la oferta de Zara. Se trata de Bershka (a la que se dedica la planta de Tordera) y Stradivarius (centro de Sallent). 

La intención de Inditex es ampliar la capacidad de estos puntos neurálgicos de su actividad con el objetivo de dar respuesta a la creciente demanda de sus productos, como prueba el hecho del incremento del 18% registrado en sus cifras de ventas, que se han ido por encima de los 32.500 millones de euros.

Optimización de operaciones

El foco de los cambios que se introducirán en las plantas logísticas será avanzar en los procesos de “optimización y automatización” de las operaciones, de forma que quede reforzado el potencial de la compañía “para ofrecer a nuestros clientes la mejor moda dónde y cuándo deseen”, según reza la nota que da cuenta de sus resultados. 

El consejero delegado de Inditex, Óscar García Maceiras, señaló en su posterior comparecencia ante los medios de comunicación que España será el principal destino del citado volumen de inversiones previsto para el ejercicio que acaba de comenzar y, además, a un ritmo notable desde el punto de vista de la actividad comercial. 

"Siguiente nivel"

La prueba es que durante las seis primeras semanas las ventas de Inditex han mejorado en un 13,5% las registradas en el mismo periodo de 2022, proporción que se eleva al 17,5% si se descuenta el efecto del cese de actividad en Rusia, donde el grupo se mantuvo activo durante gran parte de esta franja temporal el pasado año. 

Aunque la compañía no ha ofrecido más detalles sobre los planes que desplegará para pasar a ese “siguiente nivel”, sí ha querido hacer hincapié en la firme apuesta por el territorio, en forma de inversiones que permitirá asegurar el empleo y, a buen seguro, crear nuevo. 

De hecho, otro de los pilares de la estrategia de Inditex para los próximos años es la atracción de talento, con el objetivo de “seguir siendo una marca empleadora de referencia”. 

Además, Inditex también ha dejado claro que ni se plantea seguir los pasos de Ferrovial y mantendrá tanto su sede social como sus centros de producción en España. García Maceiras ha hablado, incluso, del “efecto sede” de la compañía que, entre otros impactos, incluye pagos de 6.000 millones de euros anuales a más de 6.700 proveedores locales, muchos de ellos catalanes.

El primer mercado

“Tenemos que seguir y vamos a seguir manteniendo nuestra sede social y fiscal en España”, ha asegurado con rotundidad, aun sin entrar a valorar la decisión adoptada por el consejo de Ferrovial, que llevará a su junta de accionistas el traslado de la matriz a Países Bajos. 

Inditex también ha ratificado su apuesta por España como primer mercado por número de establecimientos, con una aportación del 14% al volumen total de ventas.