La Generalitat de Cataluña, el Ayuntamiento de Blanes y los sindicatos constituyeron ayer una mesa de trabajo para impulsar la reindustrialización de Nylstar. La histórica fábrica de hilatura, controlada por el grupo inversor Praedim, comunicó la semana pasada que presentaría concurso de acreedores voluntario para proceder a la liquidación de la sociedad.
Actualmente, la empresa cuenta con 80 trabajadores. Se da la circunstancia de que dos semanas antes de dar el primer paso hacia su extinción, la compañía había retirado una expediente de regulación de empleo (ERE) que afectaba a 24 trabajadores.
Propuesta textil
En el primer encuentro de la mesa de reindustrialización, el alcalde de Blanes, Àngel Canosa, afirmó que las propuestas para mantener la actividad fabril se centrarían en la industria del textil. "La Generalitat está trabajando en la búsqueda de inversores que puedan volver no solo la seguridad laboral a estas familias, sino también generar más ocupación para nuestro municipio", declaró.
La oferta textil no es la única que podría haber sobre la mesa, pero sí la prioritaria. Por otro lado, Canosa ha lamentado que "hace meses que ha habido comisiones y reuniones en el Parlament de Cataluña porque, desgraciadamente, esta situación muchos la esperábamos".
Composición de la mesa
Además del primer edil, el encuentro contó con la presencia del secretario de Trabajo de la Generalitat, Enric Vinaixa, así como el presidente del comité de empresa, Xavier Cherino. En representación del Govern también acudieron el secretario de Empresa y Competitividad, Albert Castellanos, y el director general de Relaciones Laborales, Trabajo Autónomo y Seguridad y Salud Laboral, Òscar Riu.
Por la parte social, también asistieron los portavoces de los tres sindicatos con representación en el comité: Belén López (CCOO), Gabriel Tejada (DOMUM) y Maxi Rica (UGT).