“Aunque nuestra sociedad es la de la nube, todavía hay gente que vive mentalmente en la nube”. Con esta cita de Antoni Garrell ha comenzado la presentación de Antes muerta que analógica, el último libro de Àurea Rodríguez, bioquímica y articulista de Crónica Global. En él, ofrece una visión panorámica del papel que juegan las nuevas tecnologías en ámbitos como los negocios, la comunicación, la salud u otros aspectos de nuestra vida cotidiana. Pretende ser una ayuda conceptual con una mirada femenina en un periodo de transición complejo, que todavía se encuentra en proceso de construcción.
Durante el evento, que ha tenido lugar este miércoles en la librería Byron de Barcelona, la autora ha compartido algunos de los pensamientos que la motivaron a escribir el libro y ha acogido dos mesas redondas sobre cuestiones relativas a la ética tecnológica y empresarial. Estas han estado protagonizadas por algunos de los colaboradores de Rodríguez, que han aportado sus comentarios, escritos desde la perspectiva de cada uno de sus sectores a lo largo del libro.
Romper el paradigma
El encuentro, moderado por el periodista económico Víctor Costa, ha contado con Antoni Garrell, presidente de HM Hospitales en Cataluña y que ha puesto palabras al prólogo del libro. Garrell ha comenzado su intervención compartiendo algunas de las ideas que le ha transmitido la publicación de Àurea Rodríguez, describiéndola como una propuesta “atrevida”. Ha destacado la necesidad de reinventarse e innovar en una época de cambios mediante el despliegue de talento y teniendo siempre en mente romper el paradigma y los estereotipos.
El ingeniero ha elogiado el ejercicio de claridad y sencillez de Rodríguez --fundadora de Talentea y miembro del consejo de administración de la biotecnológica QGenomics-- con el libro, y ha resumido su espíritu en una sola frase: “o eres digital, o estás muerto”. Además, ha compartido un dato alarmante: solamente un 28,3% de los líderes del mundo son mujeres.
Referentes femeninos
En una de las mesas redondas de la sesión, Cristina Farrés, directora de este medio y colaboradora en Antes muerta que analógica, ha puesto sobre la mesa uno de los temas que trata el libro: el reflejo del machismo en la sociedad y la tecnología.
Y es que para no vivir en una sociedad en la que los algoritmos estén diseñados únicamente por hombres es necesario “romper el techo de bits” y tener un mayor número de referentes femeninos factibles. Esto quiere decir, en palabras de Farrés, reivindicar figuras que no sean necesariamente presidentas de empresas o países, sino también directoras de innovación, profesoras, madres…
La tecnología en la guerra y la industria
Lidian Qi, directora general de Qimeng Global, ha hablado de su aportación al libro, centrada en el papel de la tecnología en las guerras y los conflictos geopolíticos. Afirma que China es uno de los países que más “han hecho los deberes” en materia de Inteligencia Artificial y Big Data, pero recuerda la importancia de utilizar estos avances para mejorar la vida de las personas a la vez que para preservar los recursos de la tierra.
Esta reflexión ha sido compartida por Ezequiel Navarro, CEO de Premo, quien proporciona al libro de Rodríguez un punto de vista mucho más centrado en la industria. Ha declarado que la sociedad tiene “la responsabilidad de recuperar la industria del país” y que existe un verdadero desafío en hacerlo intentando “dejar el planeta mejor de cómo lo encontramos”.
Salud, criptomonedas e innovación
Otro sector que ha tenido una importante presencia en el libro es el de la salud. Rosa María Orriols, presidenta de Pirineus Prevenció y asesora en la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha asegurado que “aunque la tecnología salva vidas, no se trata únicamente de vivir, sino de mejorar nuestra calidad de vida”, y que es aquí donde debería entrar el verdadero rol de la ciencia.
Por su parte, Montserrat Guardia, recientemente nombrada directora de Estrategia y responsable del área de Sociedad en Mobile World Capital, ha querido poner de manifiesto, tanto en la mesa redonda como en las páginas de Antes muerta que analógica, que “es posible fallar cuando haces algo que nunca nadie ha hecho” y que, por lo tanto, la innovación comporta riesgo. Según Jordi García Brustenga, director de operaciones en ENISA, es fundamental tener en cuenta también que esta innovación no tiene por qué surgir en los departamentos de I+D o de la ciencia, sino que puede proceder también de las empresas, la sociedad civil o el sector público.
Sinergentes
La última intervención de la presentación ha sido la de la autora, Àurea Rodríguez, que ha manifestado que su libro ha estado escrito desde la convicción de que la ciencia y la tecnología son el factor más importante a la hora de ser competitivos. Ha advertido, sin embargo, que “esta tecnología de por sí no vale nada” y que “hacen falta personas con sabiduría” para saber qué hacer con ella.
Es por eso que la escritora ha querido rodearse de mentes brillantes y contar con las voces de más profesionales. “Debemos tener cuidado con los tóxicos, troyanos y trolls y rodearnos de personas sinergentes, capaces de hacer que el mundo avance”, ha afirmado Rodríguez. Ha avanzado, además, que el título de su próximo libro podría ser Planetocracia.
NFT
Para finalizar el encuentro, la doctora en química Anna Maria Segarra, quien también ha participado en la obra, ha compartido con los asistentes una infografía que aparece en el libro y en la que resume las tesis de Rodríguez durante este. Lo ha hecho de una forma original, y es que tanto ella como la autora han invitado a los presentes a hacerse con este material en forma de su primer NFT (o “token no fungible”) para el que solo han hecho 130 copias.
De esta forma han ejemplificado cómo la divulgación es la clave para el entendimiento del entorno en el que vivimos, incluso en lo que se refiere a aquellas tecnologías que podemos sentir que nos quedan ya un poco lejanas.