Foment del Treball ficha a Elsa Artadi

Foment del Treball ha fichado a la economista y exdirigente de Junts per Catalunya Elsa Artadi como consejera de la presidencia. 

En la reunión de la junta directiva de esta tarde, la organización decidirá incorporar a este equipo a Artadi; Josep Maria Guinart, exdiputado en el Congreso con CDC en 2004 y exalcalde de L'Escala (Girona); Toni Isac, exconsejero de Justicia con Jordi Pujol a mediados de los años 90, y Laura Pellisé, responsable de asuntos institucionales de la biotecnológica AMGEN. Su función, en calidad de asesores, es realizar propuestas concretas a Josep Sánchez Llibre, el líder patronal catalán, para las acciones de la entidad. Se suman a un órgano que hasta ahora formaban Valeriano Gómez, Enrique Lacalle, Vicente Martínez-Pujalte, Alex Sáez y Manuel José Silva. 

Elsa Artadi, entre Josep Sánchez Llibre y Marta Angerri, se compromete a gestionar un plan de apertura favorable al comercio y la restauración / FOMENT

Seis meses desde que abandonó la política

Contra todo pronóstico, Artadi renunció a ser la candidata al Ayuntamiento de Barcelona el pasado mayo. La exconsejera de Presidencia alegó “razones personales” para justificar su repentina retirada. En una rueda de prensa posterior, anunció que abandonaba la política activa, renunciando también a su acta como diputada autonómica y a la vicepresidencia de su partido. 

Desde su entorno explicaron en ese momento que le había pasado factura la batalla de poder dentro de la formación neoconvergente. La que acabó con Jordi Sànchez fuera de la cúpula de Junts y con la celebración de un congreso en el que Jordi Turull encabezó la secretaría general, ya que obtuvo el apoyo de la mayoría del partido, y Laura Borràs se quedó como presidenta. Las principales diferencias de Artadi, según las mismas fuentes, fueron con esta última. 

De la mano de Mas-Colell

Licenciada y máster en Economía por la Universidad Pompeu Fabra, Artadi (Barcelona, 1976) se doctoró en la Universidad de Harvard. De 2006 a 2011 fue profesora de Economía de la Università Bocconi en Milán, miembro del Comité Científico del Banco Mundial en Casablanca (Marruecos), consultora del Banco Mundial en Washington y miembro del Comité Científico de la European Economic Association.

Carles Puigdemont charla con la portavoz de Junts per Catalunya (JxCat), Elsa Artadi, en una reunión en Berlín / EFE

La economista entró en la Administración catalana de la mano del exconsejero de Economía Andreu Mas-Colell. Ocupó varios cargos hasta que, ya con el Gobierno de Carles Puigdemont, fue nombrada vicepresidenta del Govern. Tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución en respuesta al desafío secesionista, e incorporada a Junts per Catalunya --fue directora de campaña en las elecciones de 2017-- fue nombrada vicepresidenta y portavoz de la Generalitat.

Negociación del Govern

Tras los comicios de 2021, formó parte de la comisión negociadora de Junts y ERC, donde protagonizó un duro enfrentamiento con el ex secretario general de su partido Jordi Sànchez, a quien acusaba de hacer demasiadas concesiones a Pere Aragonès.

Rechazó ser vicepresidenta económica en el nuevo Govern para centrarse en la candidatura a la alcaldía de Barcelona. Todo ello, hasta que hace seis meses decidió abandonar la política.

Proximidad con Foment del Treball

Durante su etapa en política, Artadi fue cercana a Foment del Treball. Se reunió en múltiples ocasiones con la cúpula de la patronal catalana y escuchó sus propuestas, especialmente en clave local, ya que las agenda de la institución económica era cercana a la que la líder neoconvergente defendía en el ayuntamiento. Incluso en cuestiones que preocupan de forma especial en la organización con sede en vía Laietana, como la ampliación del aeropuerto de El Prat. De hecho, el tándem que podía formar con el PSC de Jaume Collboni era el preferido del empresariado catalán.

Seis meses después de cerrar una etapa en clave personal, Artadi recupera de la mano de Sánchez Llibre un papel más institucional. Lo hace con una exposición pública limitada, ya que los consejeros de presidencia tienen presencia interna en la patronal, pero poca relevancia exterior. El cargo que ahora ocupa no está remunerado y solo implica la asistencia a las reuniones del consejo que se convoquen y hacer llegar las propuestas que considere oportunas a Sánchez Llibre.