El eje logístico Barcelona-Tarragona es el tercero más importante de la Unión Europea en tráfico de mercancías. Así lo especifican las conclusiones de un estudio llevado a cabo por la asociación europea Ferrmed, que posiciona al eje catalán solo por detrás de la cuenca del Ruhr (Alemania) y de la región en torno a Milán.
La asociación recomienda concentrar las inversiones previstas en su European Green Deal en esos hubs logísticos principales y en los aproximadamente 18.000 kilómetros donde se da el 65% del tráfico de mercancías de la Unión, según explica este lunes La Vanguardia. En España, el Corredor Mediterráneo y el eje Irun-Madrid forman parte de esos kilómetros prioritarios.
Un tren de Renfe recorre un tramo del Corredor del Mediterráneo / RENFE
Ahorrar costes y reducir emisiones
El informe “identifica las áreas con mayor tráfico de la UE y propone una serie de soluciones para integrar el tráfico carretera-ferrocarril y conseguir que los remolques de los camiones para distancias más largas --más de 300 kilómetros-- puedan transportarse en tren de una forma flexible, rápida y eficiente para ahorrar costes y reducir las emisiones de gases contaminantes”, explica el presidente de Ferrmed y coordinador del estudio, Joan Amorós.
En él han participado cerca de 25 expertos de toda Europa y se presentará de manera oficial el 15 de noviembre en Bruselas. La intención es hacer una radiografía de la situación actual del sector y buscar propuestas para cumplir los objetivos del libro blanco de la UE. Eso es, conseguir que en el 2030 el 30% del transporte largo recorrido se haga por ferrocarril o vía fluvial.
La densidad del tráfico, clave
El eje logístico Barcelona-Tarragona aparece señalado en una de las partes más relevantes del estudio, encargada por el profesor Lanfranco Senn, de la Universidad Bocconi de Milán. Se refiere a él como el tercero más importante de la UE en tráfico de mercancías por carretera, ferrocarril o vías fluviales que va más allá de los 300 kilómetros. Para establecer el ranking se ha tenido en cuenta tanto la densidad del tráfico como su valor añadido bruto y la población de cada área. En este caso concreto, la densidad del tráfico es lo que más ha ponderado.
Cabe recordar que sólo el 18,7% del transporte de mercancías de la UE se hace por ferrocarril, frente al 75,4% por carretera y el 6% por vías fluviales, según datos de 2018.