Ametller espera los fondos europeos para ejecutar su clúster agrario del Penedès

Ametller lo tiene todo listo para presentar su ambicioso proyecto del Agroparc Penedès al nuevo PERTE agroalimentario. El grupo de distribución ha recabado durante el último año el respaldo institucional y empresarial para construir entre Gelida y Sant Vicenç d’Hortons un clúster agroalimentario enfocado en la economía sostenible y circular que integrará acciones como la valorización de residuos, el aprovechamiento de fuentes limpias de energía y la producción de kilómetro cero.

Pero no solo se trata de objetivos, sino también de cifras. La compañía prevé invertir 180 millones de euros --la mayoría de ellos de capital privado, precisa un portavoz de Ametller-- en la construcción del inmenso parque de 258 hectáreas. Según estimaciones de la propia empresa, el recinto creará 3.100 empleos y generará 300 millones a partir de 2027, fecha en que estaría plenamente operativo.

A la espera del PERTE

Para que este futuro distrito agroindustrial llegue a buen puerto se cuenta con la ayuda de los recursos asignados al último proyecto estratégico del Gobierno. Pese a los retrasos en el lanzamiento del PERTE agroalimentario, la publicación de la orden de bases el pasado 1 de agosto ha acelerado los trámites. Así, se espera que a mediados de noviembre se lance la primera convocatoria de estímulos por 500 millones de euros.

Presentación del Agroparc Penedès de Ametller Origen en la sede de Foment del Treball, en Barcelona / CARLOS MANZANO - CRÓNICA GLOBAL

Estas plicas destinarán los fondos Next Generation a iniciativas de la industria agroganadera vinculados con la competitividad, sostenibilidad y trazabilidad de la producción de alimentos. Un enfoque que encaja con la propuesta del grupo familiar catalán, que según fuentes del sector tiene los papeles más bien trabajados para concurrir a la convocatoria. Máxime cuando la cadena de supermercados también se ha hecho ya con el apoyo de una red empresarial para llevar adelante de forma consorciada su plan.

Boicot frustrado

A esto hay que sumarle el apoyo institucional que ha recabado el macroparque. En julio, la Federació Empresarial del Gran Penedès, UGT y CCOO, representantes políticos y miembros de los consejos comarcales del Alt Penedès, el Baix Penedès y el Garraf (Barcelona) y de varios consistorios del territorio cerraron filas con la propuesta. Meses ante, la compañía ya había presentado su plan ante la complicidad de Foment de Treball, primero, y posteriormente de la Cámara de Comercio de España.

De hecho, los intentos de boicot local han fracasado. Ni la plataforma creada ad hoc contra el clúster ni los movimientos de algunas fuerzas locales han tenido éxito. Los cupaires de Gelida pergeñaron en mayo una moción de rechazo que no concitó el respaldo de ninguna otra organización política en el municipio. Al revés: el pequeño enclave del Alt Penedès no ha puesto trabas a la adquisición de los terrenos necesarios para construir su proyecto. Con estos mimbres, ahora Ametller solo espera al nuevo PERTE.