El primer y único debate electoral entre Jaume Guardiola y Rosa Cañadas para presidir el Círculo de Economía ha constatado los principales puntos de disenso y acuerdo entre ambos candidatos. Pese a que los aspirantes han hallado un terreno compartido en la crítica al "modelo centralista de España", la controversia sobre el lugar de los jóvenes, la influencia europea de la entidad y el futuro de las jornadas anuales han marcado el encuentro.
De hecho, las propuestas de reforma territorial del Estado han constituido el principal acuerdo entre el ex consejero delegado de Banco Sabadell y la presidenta de Trea Capital en la carrera para suceder a Javier Faus al frente del lobi empresarial.
Contra la "España radial"
"El modelo territorial del país no está resuelto, está muy basado en un modelo centralizado sin una capital distribuida y con una economía muy encaminada a las grandes compañías del Ibex. No se ve el país cómo es y su complejidad", ha asegurado Guardiola.
Por su parte, Cañadas ha afirmado que a Cataluña "le conviene buscar complicidades y alianzas con otras comunidades autónomas para cambiar este concepto de España radial". "España no tiene un modelo de distribución racional de recursos", ha añadido.
Pique por los socios jóvenes
Pero esta sintonía no ha evitado que ambos candidatos se enzarzaran en un diálogo más tenso de lo esperado. Cañadas ha replicado a Guardiola que la acusara ayer de "buscar jóvenes por buscar jóvenes". "No he incluido a jóvenes porque sí. He cogido a jóvenes de la nueva economía y de las pymes que ya estaban muy implicados en el Círculo", ha contestado.
Guardiola no se ha achicado ante, a su juicio, esta "crítica gratuita". Le ha respondido que su candidatura cuenta con ocho miembros con menos de 45 años y que la búsqueda de perfiles júnior debe servir ante todo para reunir personas con "posiciones profesionales que permitan aportar" a la actividad de la organización.
Influencia en la Unión Europea
Otro elemento de confrontación ha llegado con la presencia del Círculo en las instituciones europeas. La empresaria ha aseverado que el Cercle "nunca ha estado ni ha podido debatir en Europa" y ha propuesto inscribir a la asociación en el registro de grupos de interés de la Unión Europea (UE). Por su parte, Guardiola le ha contestado que la entidad siempre ha estado involucrada en la UE como muestra la reciente visita del comisario Margaritis Schinas a Cataluña. "Fue la visita de Ursula von der Leyen en las jornadas del Círculo de Economía las que normalizaron esta visita", ha asegurado.
Tampoco las jornadas anuales del Círculo han estado a salvo de las visiones contrapuestas de los candidatos. Mientras Cañadas ha lamentado la pérdida del "espacio de reflexión que permitía Sitges" y ha propuesto celebrar dos certámenes --"uno más coyuntural y otro más enfocado al pensamiento donde el socio pueda tener una participación más activa"--, Guardiola ha elogiado el traslado del cónclave a Barcelona. "Le da más proyección y las dos jornadas que hemos hecho lo demuestran. Hacer algo en Sitges más pensado en petit comité y con interacción directa no lo veo", ha dicho.
Puigdemont se cuela en el debate
En el encuentro también se ha colado un protagonista inesperado: el expresidente prófugo Carles Puigdemont. Un espectador ha preguntado a Cañadas y Guardiola si se entrevistarían con el exmandatario en Bélgica. La presidenta de la fundación Tanja ha sido tajante: "No iría a Waterloo a llamar a la puerta de Puigdemont porque no creo que tenga algo que nos pueda hacer avanzar en el proyecto de encaje de Cataluña y España. No iría a perder tiempo".
Por su parte, el presidente de la fundación Esade ha considerado que "en este momento no sería un objetivo prioritario ir a Waterloo". "Aunque con las personas que representan su opción política en Cataluña debemos tener relaciones de absoluta normalidad. Pero en la nueva relación de Junts, Puigdemont se ha quedado fuera del marco político", ha concluido.