Los taxistas vuelven a plantarse. El sector prepara una nueva huelga en Barcelona la semana que viene para reclamar a la Generalitat que continúe poniendo límites a operadores de vehículos VTC como Uber o Cabify.
Estas dos compañías se retiraron de la capital catalana en 2019 en protesta por los cambios regulatorios. Cabify volvió al cabo de un mes y Uber lo hizo dos años más tarde.
Marcha lenta por la Gran Via
Élite Taxi, el Sindicato del Taxi de Cataluña (Stac) y la Agrupación Taxi Companys han convocado una huelga, que durará cuatro horas, para el próximo miércoles. La movilización empezará a las nueve de la mañana y, a las diez, una marcha lenta de taxis discurrirá por la Gran Via desde Balmes hasta plaza Tetuán.
El sector catalán del taxi reclama a la Generalitat un decreto ley que mantenga la proporción de un VTC por cada 30 taxis, pero en la rueda de prensa desde la que han convocado la movilización, las asociaciones han insinuado que el Govern no planea respetar la proporción, sino que autorizará todas las VTC, algo que consideran que sería implantar el "modelo Ayuso".
Cambio legislativo
El próximo 29 de septiembre finaliza el decreto Ábalos, que permite a las licencias VTC operar trayectos urbanos, es decir, dentro de las áreas metropolitanas. En ese momento la regulación dependerá de las autonomías: si la Generalitat no hace ningún cambio, las plataformas no podrán operar.
Las principales asociaciones y sindicatos del taxi temen que la nueva regulación catalana de los VTC no contemple "respetar" la ratio establecida por una sentencia del Tribunal Supremo. "Si quieren blanquear las VTC como Ayuso, que lo digan claramente", ha recriminado el portavoz de Élite Taxi, Tito Álvarez, a la Generalitat.