Nuevo revés judicial para Iberpotash. El Juzgado de lo Penal 1 de Manresa ha rechazado el último plan de la compañía para restaurar pozos contaminados por “insuficiente”, y le da un mes de plazo para presentar otro proyecto de recuperación ambiental que cumpla con la sentencia del 2016 que la condenó a reparar los daños causados con sus actividades. De lo contrario, se tomarán otras medidas.
En concreto, la jueza advierte a Iberpotash de que, si no presenta un proyecto adecuado en un mes, encargará al Departamento de Medio Ambiente o a la Agencia Catalana del Agua (ACA) un plan de ejecución que cumpla “íntegramente” con lo que establece la sentencia de la Audiencia de Barcelona y cuyo coste iría a cargo de la empresa minera.
Nuevo retraso
Por ahora, este contratiempo judicial vuelve a retrasar la recuperación ambiental de los acuíferos afectados por los vertidos salinos de las minas de Iberpotash en Sallent y Súria (Barcelona), seis años después de que deviniera firme la sentencia que condenó a cinco meses de cárcel a tres exdirectivos de las minas y ordenó restaurar las zonas afectadas por las actividades de sus centros de producción.
Hay que recordar que la justicia ya devolvió a Iberpotash un primer plan que propuso para recuperar los acuíferos, al considerarlo demasiado inconcreto, y le emplazó a presentar un nuevo proyecto para cumplir con la sentencia, que obligaba a retirar las montañas de residuos salinos, limpiar los pozos contaminados, eliminar su elevada salinidad y detener los vertidos.
Estudio geológico y análisis hidroquímico
Ahora, la jueza requiere a Iberpotash otro plan –que un perito designado por el juzgado deberá acreditar que se ajusta a la sentencia— con la fecha de inicio y el calendario de los trabajos de retirada de escombros salinos al descubierto sobre los terrenos no permeabilizados en las zonas de Cabanases, Fusteret, Súria, Botjosa, Cogulló y Sallent.
En este sentido, urge a la empresa a llevar a cabo de forma “inmediata” un estudio geológico en 3D de la zona, además de un análisis hidroquímico y piezométrico, con el fin de “diseñar de manera concreta y en un plazo breve de tiempo las propuestas de descontaminación de las zonas afectadas”. También plantea el establecimiento de puntos de control de cloruros en tiempo real en los ríos y pozo afectados, así como acciones concretas para recuperar los niveles de salinidad natural de las zonas de tránsito dentro de las formaciones permeables.
El río Cardeners
Para ello, exige “medidas inmediatas” para proteger la zona del río Cardeners de posibles infiltraciones salinas, abrir nuevos pozos de captación y rasas drenantes en zonas afectadas como la de Sallent y reponer con tierra de nueva calidad para uso agrícola y debidamente compactada todas las tierras salinizadas.