Anna Scheidgen, consejera delegada de Alfico-New Balance Iberia, ha abandonado el grupo textil tras más de 45 años al frente de su filial en España y Portugal. La división ibérica de la marca fue fundada por Scheidgen y su marido, Ángel Álvarez (fallecido en 1990), con el objetivo de introducir la enseña de zapatillas deportivas en el país. Scheidgen da un paso atrás al jubilarse de la compañía que fundó junto a su marido.
La salida de la directiva coincide en el tiempo con el proceloso litigio abierto entre Alfico-New Balance Iberia y su distribuidora nacional, Experience Group, que ha derivado en el despido de todos sus trabajadores en el país. En diciembre de 2021, la comercializadora presentó un expediente de regulación de empleo (ERE) para sus 250 empleados en el mercado ibérico.
Cierre de todas las tiendas
La rescisión del contrato de explotación de la marca en España está detrás de esta extinción masiva de contratos. Alfico-New Balance Iberia no renovó su colaboración con Experience alegando unos incumplimientos de pago que, a su vez, su socio distribuidor niega. El contencioso sigue abierto en los tribunales.
De resultas de este conflicto entre ambas empresas, New Balance ha desaparecido por el momento de España y Portugal. La compañía estadounidense echó el cierre en enero de los 22 establecimientos repartidos en la Península. La marca explicó a Crónica Global que potenciará a partir de ahora su canal online, aunque no ha detallado cuál será su nueva estrategia de implantación en ambos mercados la retirada de toda su presencia física.