Cementos Molins prevé reducir un 20% sus emisiones de CO2 hasta 2030 en el marco de su plan de sostenibilidad. Además, la compañía dirigida por Julio Rodríguez se propone alcanzar la neutralidad de carbono en 2050.
Asimismo, los planes de la cementera incluyen una reducción de las emisiones canalizadas de material particulado (PM) en un 50%, de NOx en un 40%, y de SOx en un 10%.
Energías renovables
Rodríguez ha explicado que "estos objetivos y los planes de acción correspondientes son el fruto de un intenso trabajo" y ha insistido en el compromiso con las cero emisiones.
La empresa también prevé consumir un 55% de electricidad de fuentes renovables en 2030. Para alcanzar esta meta "apostará por combustibles alternativos, la máxima eficiencia energética, la generación de energía eléctrica renovable y la producción de cemento y productos derivados con menor huella ambiental".
Respeto a la biodiversidad
Asimismo, Cementos Molins apunta a alcanzar una tasa de sustitución energética del 40% y una "reducción significativa" del contenido de clínker en el cemento hasta llegar al 68% a nivel global. La multinacional pone el foco en el impulso de procesos para recuperar el calor residual y reducir la generación de residuos.
En la estrategia también se estipula que todas las fábricas creen un programa de biodiversidad junto a las comunidades locales.