La licitación de obra pública en Cataluña está próxima a superar la cota alcanzada al cierre de 2019, el año anterior a la pandemia y, de registrar con ello la cifra más elevada de los últimos 11 años.

A falta de consignar las cifras correspondientes al mes de diciembre, la Generalitat ha llevado cabo licitaciones de obra pública por valor de 732,09 millones de euros, lo que supone un 18,8% más que en el mismo periodo de 2020.

Por encima de 2019

Si se comparan los datos con los registrados en el año pre-Covid, la proporción también resulta favorable al ejercicio 2021. Así, el volumen de los contratos licitados en el tramo enero-noviembre del año que acaba de finalizar supera en un 8,7% al del comparable de 2019.

De acuerdo con las cifras facilitadas por Seopan, la patronal de las grandes compañías de construcción e infraestructuras y de las concesionarias de autopistas, la Generalitat habría alcanzado con creces los máximos desde 2010 si mantiene la tendencia de los últimos años en el mes de diciembre, en el que los números se han ido por encima de los 100 millones de euros.

Liderazgo en 2010

Eso sí, en cualquier caso el volumen definitivo se quedará lejos del registrado en el ejercicio 2010. En el periodo enero-noviembre, la Generalitat puso en marcha contratos de obra pública valorados en 1.353 millones de euros, cerca de un 46% por encima del dato de 2021.

Aquel año, que aún mantenía la inercia licitadora de los ejercicios anteriores a la crisis financiera, Cataluña acabó como líder indiscutible en lo que se refiere a la licitación de las comunidades autónomas, con algo más de 1.395 millones de euros. Una cantidad que supuso el 15,1% del total correspondiente a los gobiernos regionales, entre los que Euskadi y la Comunidad de Madrid también superaron la barrera de los 1.000 millones de euros.

Menor peso

En este plano, la panorama ha cambiado de manera sensible. A falta de los datos de diciembre, Cataluña es la tercera autonomía con mayor volumen de licitación, por detrás de la Comunidad de Madrid, que ya ha superado la citada referencia de los 1.000 millones, y Andalucía, que se ha quedado a poco más de cinco millones.

Del mismo modo, también se ha reducido el peso de las licitaciones de la Generalitat en el conjunto de las Administraciones regionales del Estado. Hasta noviembre, éste era del 12% algo más de tres puntos opir debajo del registrado en 2010. Por su parte, el de la Comunidad de Madrid roza el 18%, frente al 11,3% que representó en 2010.

Tendencia estatal

En cuanto al conjunto de Administraciones Públicas del Estado, el ejercicio 2021 también marcará su cifra más elevada de los últimos once años en lo que se refiere al volumen de la licitación pública, que se ha disparado un 80% en relación al registrado en 2020, muy afectado por la pandemia.

También a falta de las cifras de diciembre, los datos facilitados por Seopan señalan algo más de 21.000 millones de euros en contratos de obra pública cuya tramitación se ha iniciado en 2021.

El impulso de los ayuntamientos

La cantidad es un 11,2% inferior a la registrada entre enero y noviembre de 2010, aunque se da la circunstancia de que aquel año la Administración Central licitó un volumen notablemente inferior al año que acaba de finalizar. De hecho, la cifra del conjunto de 2010 ascendió a 5.481 millones de euros, es decir, un 19,3% inferior a la de 2021 incluso a falta de un mes en el caso de este último.

Aquel 2010, el tirón de las Administraciones regionales y locales fue muy superior, hasta el punto de que el volumen de licitaciones llevado a cabo por el conjunto de estas últimas superó en 2,09 veces el de las dependientes del Gobierno central, hasta alcanzar casi los 11.500 millones de euros.

Se estrecha el margen

En el caso de las comunidades autónomas, sus cifras de licitaciones superaron en un 68% a las de la Administración Central.

El panorama también ha variado de forma sustancial si se compara con el de 2021. De hecho, hasta noviembre los organismos públicos dependientes de Moncloa superan en contratación de obra pública a los de las autonomías en un 11,7%. Ayuntamientos y corporaciones locales siguen licitando más en un conjunto pero la diferencia se ha estrechado hasta el 20%.