La salida de Ismael Clemente como consejero delegado de Merlin va a ser sonada. El equipo directivo de la socimi, que apoya firmemente al ejecutivo, ha emitido un manifiesto muy crítico con Santander, primer accionista de la empresa y que ha promovido la crisis, al que acusa de tener un comportamiento “abusivo” y ”feudal”.
En un breve escrito, firmado por la totalidad del equipo directivo de Merlin y apoyado por 185 empleados de la compañía, se manifiesta el apoyo tanto a Clemente como al actual director general y de operaciones, Miguel Ollero (cuya salida también se da por hecho), y también a David Brush como fundadores de la empresa, hace más de siete años.
Lanzar una opa
Sin mencionar de forma explícita a Santander, los firmantes expresan su disconformidad con el comportamiento de “accionistas minoritarios que pretenden ejercer el control mayoritario hurtando al resto de accionistas su participación en la toma de decisiones”.
Los directivos instan a la entidad financiera a pagar la correspondiente prima de control a través del lanzamiento de una opa para “pagar al resto de accionistas el valor justo de mercado”.
Mayoría de independientes
Santander es el primer accionista de Merlin aunque, en efecto, tiene carácter de minoritario, ya que controla poco más del 22% del capital. Le acompañan como socios con participaciones significativas Nortia Capital (sociedad del inversor Manuel Lao, antiguo propietario de la empresa de juego y ocio Cirsa), con un 8,1%, y el fondo Blackrock, con un 3%.
El consejo de administración está compuesto mayoritariamente por vocales independientes, que ocupan siete de los 13 asientos; otros cuatro son para consejeros dominicales (tres nombrados por Santander y otro por Nortia); mientras, Clemente y Ollero son, hasta ahora, los ejecutivos.
"No cederemos ante el abuso"
En el citado manifiesto, el equipo directivo de Merlin deja entrever que la batalla interna no finalizará, en último término, con la salida de Clemente, al asegurar que “velará por los intereses de la sociedad hasta el final con el apoyo de la plantilla”.
Y remata con un concluyente “No cederemos ante el abuso”.
(NOTICIA EN AMPLIACIÓN)