GCR Group ha alcanzado un preacuerdo con Bosch para hacerse con la planta de la compañía en Castellet i la Gornal (Barcelona). Las instalaciones, que abandonaron la semana pasada su actividad en la industria de la automoción, volverán a activarse, si todo va según lo esperado, en junio o julio del año próximo, esta vez como un centro de reciclaje de plásticos.
El plan de reindustrialización permitirá recolocar a 60 exempleados, aunque un total de aproximadamente 170 trabajadores entrarán en un programa específico de formación y ayudas financiado con fondos europeos que se iniciará entre marzo y abril de 2022. Antes de cerrar, la factoría daba trabajo a unas 300 personas, aunque llegó a tener en plantilla a 1.200 efectivos hace diez años.
Fuga a Serbia y Polonia
El preacuerdo, que debía alcanzarse el pasado septiembre, ha llegado con retraso, aunque finalmente permitirá recolocar a parte de la plantilla tras la marcha de la fábrica a Serbia. Queda pendiente el acuerdo en el centro de Lliçà, relocalizado a Polonia.
El único proyecto que finalmente ha quedado sobre la mesa de Bosch es el de la catalana GCR Group, una firma de La Bisbal del Penedès dedicada a las soluciones medioambientales para reciclar plástico para uso industrial, alimentario o cosmético.
Los sindicatos, satisfechos
UGT y CCOO han valorado "positivamente" el proyecto presentado por GCR, que plantea la posibilidad de añadir más contrataciones a posteriori, según han informado los sindicatos en sendos comunicados. El comité de empresa considera que, a pesar de no recuperar todos los puestos de trabajo perdidos por Bosch, el nuevo proyecto es "una buena noticia" al tratarse de una empresa con trayectoria ascendente y un proyecto con potencial de futuro.
Josep Anton Llenas, secretario general de la Sección Sindical de CCOO de Robert Bosch Castellet, ha señalado a Crónica Global que para la plantilla, pasar del sector de la automoción al reciclaje será un "cambio total", aunque ha valorado que GCR "es una empresa pionera a nivel europeo" con actividades "muy modernas e informatizadas". También indica que inicialmente solo podrán sumarse al nuevo proyecto la sesentena de trabajadores que superen el proceso de selección, si bien no es una cifra cerrada: "A la larga, a cinco o diez años, esperamos que acabe dando más ocupación que estos 60 [puestos]".