Es uno de los productos emblema de la denominada marca España, con fama y prestigio internacional y que tiene detrás una industria que da trabajo a comarcas enteras de la Comunidad Valenciana. El calzado levantino es uno de los sectores que sufre en sus carnes durante estas semanas la crisis de suministros que ha puesto en jaque a buena parte de la actividad económica mundial, hasta el punto de desabastecer los stocks de un buen número de establecimientos.
Muchos han sido los clientes que han tratado de adquirir en las últimas semanas productos de calzado y complementos en las afamadas firmas de la Comunidad Valenciana, en las tiendas físicas y, sobre todo, vía online, y se han encontrado con la desagradable sorpresa de la falta de existencias.
Navidades a la vista
La situación se complica ante los picos de demanda habituales en estas fechas del año, con la campaña de Navidad en lontananza y, desde hace unos años, con el anticipo del Black Friday, que este ejercicio será especialmente complicado.
La industria valenciana del calzado sufre las consecuencias del colapso en la cadena de un proceso productivo y comercial que, en este caso en particular, presenta un marcado componente artesanal .
Demanda desatendida
Un buen número de empresas del sector trabaja con proveedores de la zona con el fin de contribuir a mantener viva la industria auxiliar del calzado. Sin embargo, pese a no depender en este caso del comercio internacional, se han encontrado con la circunstancia negativa de que los tradicionales suministradores también se encuentran faltos de existencia de materiales como cuero, piel y otras materias primas.
De esta forma, muchas de las comercializadoras de calzado que trabajan prácticamente a pedido, es decir, que fabrican en función de la demanda que reciben, se han visto incapaces de atenderla a tiempo.
Desabastecimiento de materiales
Ha sido el caso, sin ir más lejos, de Mint&Rose, cuya fundadora, Monti Gutiérrez, ha tenido la peculiar y muy transparente iniciativa de grabar un pequeño vídeo en el que explica a los clientes los motivos por los que la firma está teniendo problemas a la hora de contar con los modelos más solicitados por sus clientes y las razones por las que los stocks están vacíos.
“Como muchas otras empresas, estamos teniendo un problema de desabastecimiento de materiales”, explica la empresaria en el vídeo, en el que asegura que “estamos trabajando sin parar, tanto el equipo de diseño de Mint&Rose como las fábricas con las que trabajamos” para tratar de que los clientes que se inscriben en una siempre incierta lista de espera vean satisfecho su pedido lo antes posible.
Atasco en el puerto
La mayoría de las materias primas para la fabricación de los productos de calzado y complementos de la zona llegan por vía marítima, a través de los puertos de la región, especialmente el de Valencia, que es uno de los principales de toda España por número de contenedores.
La infraestructura no es ajena al gran atasco generalizado que se está produciendo debido al repunte de la demanda en todo el mundo después de un largo periodo de inactividad y reclusión a causa de las medidas implantadas para paliar la expansión del coronavirus.
Sin fechas de entrega
La fabricación de los productos depende en la mayoría de los casos de componentes y materiales que llegan desde fuera, especialmente del Sudeste Asiático. Uno de los componentes en el que se refleja esta situación es el de las cremalleras que se emplean para la fabricación de algunos modelos de bolsos y calzados.
Pedidos que habitualmente tardaban en llegar entre dos y tres semanas ahora se demoran durante meses… y en muchos casos su fecha de llegada es incierta. Los proveedores ya no son capaces muchas veces de dar una fecha porque lo más probable es que sus estimaciones no se cumplan.
Los costes se disparan
Desde la firma Serena Whitehaven señalan que los retrasos se deben en ocasiones a que los cargueros han sido desplazados a Estados Unidos a causa del colapso de los grandes puertos europeos, lo que hace que entregas que se resolvían en 15 días ahora no se hagan efectivas antes de dos meses.
Esta firma no se ha encontrado con problemas de desabastecimiento dado que trabajan con proveedores que les suministran materiales por largas temporadas y no emplean productos procedentes de China, según explican a Crónica Global. Sin embargo, sí padecen el otro gran efecto de esta situación: la notable subida de los costes.
Patronales en alerta
Uno de los materiales en los que más se ha dejado sentir este impacto es el cuero, sin olvidar el incremento de costes del cartón, empleado para el embalaje del producto.
Desde la Asociación Valenciana de Empresarios del Calzado (Avecal) se hace también hincapié en este punto. “El encarecimiento en los costes de las materias primas se está trasladando a los precios de los componentes en la industria auxiliar del calzado”, señala a este diario Marián Cano, presidenta de la patronal.
Repercusión en los precios
No obstante, la agrupación también constata que, en este momento, la producción está centrada en la campaña de primavera-verano y que “las empresas ya habían hecho sus pedidos de materias primas y componentes a sus proveedores para poder producirlas”.
Sea como fuere, los comerciantes se encuentran con que el precio de las mercaderías que distribuyen se han disparado con lo que no les queda otro remedio que repercutir esta subida en el precio final de venta al público.