El grupo Raventós Codorníu ha alcanzado el liderazgo en el sector del cava orgánico, con un 35% del mercado internacional. La elaboradora de cava más antigua de España ya comercializa 4,77 millones de botellas de cava ecológico --cultivado libre de pesticidas químicos y regulado por organismos acreditados-- y se ha fijado el objetivo de convertirse en la compañía de vinos sostenible que más crezca de aquí a 2025.

Además, el grupo planea que la marca Codorníu sea 100% ecológica en 2024. Actualmente, ya lo son los sellos de cava Parxet, Titiana y Raimat, en paralelo a iniciativas como la reducción del consumo eléctrico, la instalación de paneles solares en las bodegas o la mejora del embalaje y packaging --actualmente está desarrollando la botella de cava más ligera del mercado--.

 

3.500 hectáreas

La empresa opera actualmente 3.570 hectáreas de gestión ecológica en lo que define como el principal viñedo de estas características en Cataluña y uno de los primeros en Europa. Según ha explicado el grupo en una rueda de prensa sobre su estrategia en sostenibilidad, el 80% de la uva que compra para Codorníu es ecológica, con un coste de 44 céntimos por kilo frente a los 32 céntimos de referencia.

Diego Pinilla, responsable de Producción de Raventós Codorníu, y Sergio Fuster, consejero delegado / RAVENTÓS CODORNÍU

Sergio Fuster, consejero delegado del grupo, ha expresado su voluntad de que la “gran mayoría” de la producción de sus marcas sea ecológica en 2024. “Somos líderes y estamos al principio de la transición. Esperamos que esta posición de liderazgo se consolide y ser un ejemplo para la industria”, ha señalado. Según ha apuntado, el movimiento orgánico en la agricultura lo lidera Europa seguida de Estados Unidos, mientras que Latinoamérica y el resto de regiones van por detrás, aunque ha augurado que también allí llegará esta transición.

Referente en cultivo ecológico

Diego Pinilla, responsable de Producción y Operaciones de las bodegas, ha asegurado que su compañía se ha convertido en “un referente en cultivo ecológico” gracias a “un gran esfuerzo en una finca como Raimat”, de cultivo propio y una de las mayores del continente. Asimismo, ha defendido que el liderazgo actual es gracias a haber sido “pioneros en técnicas de cultivo ecológico”.

“Un crecimiento que no sea sostenible no nos interesa”, ha sentenciado Fuster, que también ha celebrado el “momento de verdadero crecimiento” que vive su empresa por sus esfuerzos comerciales. También por la “creciente demanda en España e internacionalmente” que ha atribuido a la recuperación económica y la mejora en el sector de la restauración. Y, aunque ha reconocido que las “presiones inflacionarias” también afectan a la producción de cava, se ha comprometido a no subir precios en Navidades ni a corto plazo.