El empresariado catalán da ya por hecho que hacer negocio con la transición hacia una economía más sostenible aporta beneficios. Esta constatación, junto con el protagonismo de la colaboración público-privada y los fondos europeos como impulso a una recuperación económica respetuosa con el medio ambiente, ha dominado el arranque del primer congreso Forbes Summit Sustainability celebrado por primera vez en Barcelona, en el Gran Teatre del Liceu.
“Lo verde es rentable. Es una oportunidad”, ha destacado Josep Amatller, director general de los supermercados Ametller Origen, que ha asegurado que el programa de fondos europeos Next Generation “va a ayudar a que la recuperación sea sostenible”.
“Lo verde ya es negocio”
“En el ámbito ambiental vamos tarde, pero lo verde ya es negocio”, ha coincidido Gregorio Cascante, consejero delegado de la firma consultora Daleph, que por otro lado ha expresado preocupación por el hecho de que la brecha social no lo es, cosa que la perpetúa. Sobre el efecto de la llegada de fondos europeos, ha vaticinado que “nos va a permitir salir más rápido de la crisis de la pandemia”, por su potencial como posible “activador de la demanda”.
José Moisés Martín, consejero delegado de Red2Red, ha advertido que el impacto de la crisis climática en la economía será equivalente a “cinco pandemias” y ha afirmado que “la sostenibilidad es una precondición para el crecimiento e incluso una oportunidad”, ya que el mundo empresarial puede “liderar este reto”.
Competitividad verde
El chef del Celler de Can Roca, Joan Roca, ha destacado las posibilidades que ofrecen los proyectos sostenibles en el mundo de la alimentación y ha ejemplificado que los uniformes de su restaurante se hacen con el plástico que desechan. Jordi Valls, director de Mercabarna, ha destacado que el mercado ha instalado placas fotovoltaicas, compra energía verde para limitar las emisiones de carbono e impulsa iniciativas de distribución urbana de última milla.
En la apertura institucional del evento, Jaume Collboni, primer teniente de alcalde de Barcelona, ha reconocido que las pautas de desarrollo de la sostenibilidad y la igualdad “son las más urgentes”, pero “no serán posibles” sin la competitividad. Por su parte, el director de Forbes en España, Andrés Rodríguez, ha alertado de los riesgos de que el ecologismo se haya vuelto una “moda” con “un cierto componente de buenismo”, y ha reclamado que sea una apuesta estable no solo financiada con impuestos, sino a través de la economía circular de las empresas.