La epidemia del coronavirus ha pasado hasta el momento una onerosa factura a las arcas públicas catalanas, tanto desde el punto de vista del gasto extraordinario como de la reducción de los ingresos como consecuencia del desplome de la actividad económica. En total, algo más de 7.500 millones de euros desde marzo de 2020, una cantidad equivalente al 3,1% del PIB catalán de 2019, el año anterior al de la irrupción del Covid-19.
Un impacto aún mayor si se toma como referencia la producción de 2020, lo que elevaría la cifra hasta cerca del 3,5%, aunque la referencia del pasado año resulta del todo distorsionadora por lo atípico del ejercicio.
Gasto sanitario
El gasto extraordinario al que se ha visto sometida la Admistración como consecuencia de la pandemia asciende a 6.244 millones de euros en este año y medio, de acuerdo con las cifras de liquidación presupuestaria de la Generalitat que recoge la agencia Efe.
La principal partida ha sido la del gasto extraordinario en materia sanitaria, que sólo en 2020 se fue por encima de 1.900 millones de euros. Mientras, la cifra correspondiente a las ayudas y subvenciones a los sectores más penalizados por la pandemia superó los 1.500 millones de euros.
Continuidad en 2022
En lo que se refiere al gasto sanitario, el escenario no va a sufrir demasiadas modificaciones si se atiende a los expresado en las últimas horas por el conseller de Salud, Josep Maria Argimon, que ha solicitado públicamente al Gobierno central que no deje de apoyar a la Generalitat en este capítulo, que supone una cantidad anual de entre 1.600 y 1.800 millones de euros al año.
Un escenario que no parece que vaya a cambiar en 2022. “Sería ingenuo pensar que el año que viene no vayamos a tener virus”, apuntó este sábado Argimon en una intervención en Catalunya Ràdio.
Mejora epidemiológica
Pese a lo expresado por el conseller, la evidente mejora en la evolución de la pandemia también se ha visto reflejada en el gasto sanitario correspondiente a lo que va de año 2021.
Así, hasta agosto esta partida ha supuesto el 27,6% del total, frente al 53,5% de 2020.
Minoración de ingresos
Según datos del último informe mensual de ejecución del presupuesto de la Generalitat, que abarca hasta el 31 de agosto, el gasto indirecto o inducido que ha provocado la pandemia a la Generalitat en estos ocho últimos meses suma un total de 1.774 millones de euros este año, con lo que duplica ya al puramente sanitario (729,58 millones) y sociosanitario (138,26 millones).
A la hora de medir el impacto de la epidemia en las arcas públicas también cabe tener en cuenta los ingresos que han dejado de percibirse, especialmente como consecuencia de las medidas restrictivas para tratar de frenar el avance de los contagios.
Impacto reducido en 2021
En este sentido, la pandemia ha mermado en 1.261,7 millones los ingresos de la Generalitat desde marzo de 2020. A diferencia del anterior, en este caso el impacto se concentra en mayor medida en el pasado ejercicio, ya que durante 2021 se han levantado progresivamente las numerosas medidas de seguridad que estaban vigentes y que suponían un severo límite a la actividad económica y comercial.
Hasta tal punto que el 89% de este impacto negativo se registró en 2020, mientras que los ingresos cesantes que la Administración acumula en 2021 se cifran en algo más de 138 millones de euros.