BBVA sigue los pasos de entidades como Bankinter y Santander y también retomará su política de dividendos donde la dejó cuando tuvo que suspender la retribución al accionista por el veto del Banco Central Europeo (BCE). El consejo de la entidad ha aprobado un primer pago a cuenta de los resultados de 2021 de 8 céntimos de euros por acción, que hará efectivo el próximo 12 de octubre.
De esta forma, la entidad cumple con su compromiso de mantener el ‘pay-out’ (el porcentaje de resultados destinado a dividendos) en el entorno de entre el 35% y el 40%.
A la espera de la estrategia
La restricción al reparto de dividendos por parte del BCE vence precisamente este jueves, tras el anuncio realizado por el regulado el pasado mes de julio. El organismo adoptó esta medida como consecuencia de la pandemia, con el fin de que las entidades reforzaran lo máximo posible su solvencia con vistas a afrontar posibles tensiones de liquidez en el mercado.
No obstante, el consejo no ha dado detalles aun sobre el plan de recompra de acciones que el consejero delegado del BBVA, Onur Genç, ha anunciado en reiteradas ocasiones. Está previsto que antes de fin de año, probablemente el próximo noviembre, la entidad dé a conocer más información sobre la operación, que podría incluir la adquisición de hasta el 10% del capital, el máximo permitido por Ley.
Salida de EEUU
Por ahora, el banco realizará dos pagos anuales a sus accionistas: uno tentativamente en octubre del año en curso (dividendo a cuenta) y otro en abril del siguiente ejercicio (dividendo complementario).
La entidad ultima su estrategia para los próximos años tras culminar, antes del verano, su gran operación de los últimos años: la venta de la práctica totalidad de su negocio en EEUU, que le ha reportado ingresos próximos a los 9.000 millones de euros.