La segunda edición de la Barcelona New Economy Week (BNEW) se celebrará del próximo 5 al 8 de octubre con el doble de ponentes, eventos y asistentes que el año pasado y será también más global, con una internacionalidad que superará el 50%. El evento contará con siete edificios emblemáticos, frente a los tres del año pasado.
Los cuatro que se incorporan este año son la Roca Barcelona Gallery, que se centrará en la sostenibilidad; La Pedrera, para el talento y ciencia; la Antigua Fábrica Damm, logística; y la Boqueria, donde el año pasado ya se realizaron pequeñas actividades y ahora se reforzará con actos sobre diseño, cultura y gastronomía. Estos se añaden a los que ya se utilizaron en 2020: la Estación de Francia como centro neurálgico, la Casa Seat y el Movistar Centre.
Aspira a doblar cifras
El evento aspira este año a doblar sus dimensiones en todos los aspectos y pasará de 400 a 800 ponentes, diez platós de televisión, diez grandes eventos y la participación de más de 1.000 startups. Este es el objetivo también en cuanto a los asistentes, y la organización se muestra optimista ya que por ahora se han superado los inscritos del año pasado, con 12.000 profesionales.
El evento, que contará con 38 patrocinadores, se celebrará esta vez en un formato 70% digital y 30% presencial. Se calcula que generará casi un millar de puestos de trabajo, 200 directos y más de 700 indirectos.
Reactivar la economía
“Es un evento que realmente activa y reactiva la economía”, ha asegurado Blanca Sorigué, directora general del Consorcio de la Zona Franca, en la presentación de la BNEW, que ha destacado la implicación de los ponentes y la fuerza de las alianzas con decenas de asociaciones.
Por su parte, Pere Navarro, delegado especial del Estado en el consorcio, que ha descrito el evento como un “soplo de optimismo para Barcelona y todo el mundo”. Ha confirmado la asistencia de la vicepresidenta Nadia Calviño y la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, y, a la espera de la confirmación de la representación institucional por parte del Ayuntamiento de Barcelona --esta vez no asistirá la alcaldesa Ada Colau-- y la Generalitat, Navarro ha expresado su voluntad de que el BNEW “sea un lugar en el que el consenso político, que es imprescindible para que la economía funcione, se vea reflejado”.